De todos los placeres del verano me quedo con este: flotar desnudo y de noche en la piscina mirando a las estrellas.
Es un placer no solo porque el agua y la desnudez se hicieron la una para la otra, sino porque en ese templo de las estrellas sobre el agua es natural y fluida la conversación con Dios.
Vengo, pues, con muchas ganas de charlar con vosotros y de contaros lo que me han contado las estrellas.
La primera es recomendaros el blog de mi hermano Daniel: Almanaque de alacranes, donde cada día colgará un punzante epigrama para despertarnos.
Un abrazo a todos
¡Espero que se prodigue usted un poco más que el curso pasado, don Epifanio!
ResponderEliminar25 neutonios septembrinos.
¡Me alegro de saludarle, don Diego! Si usted supiera lo liado que he empezado el curso... Pero intentaré prodigarme más. 25 neutonios descansados
ResponderEliminarGracias por la recomendación. Yo también la recomiendo.
ResponderEliminarDaniel, de poeta poeta, un abrazo fuerte.
ResponderEliminarSiempre regalando! ...Gracias por la recomendación.
ResponderEliminarVarenka, el blog de Daniel no te defraudará
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