miércoles, 22 de abril de 2020

Campanas en Sevilla durante el confinamiento

A la hora del Regina coeli me subo a la azotea. Con el confinamiento nunca ha habido en Sevilla tanto silencio, y las campanas la atraviesan de horizonte a horizonte, y siento con ellas que el Cielo no se ha olvidado de nosotros, que el virus no es el rey de este mundo.

Gracias, campanas de Dios, por llover tantos versos y tañidos sobre nosotros.

3 comentarios:

  1. Don Epifanio:
    esas campanas, que lo mismo anuncian muerte que vida.
    ¡Ojalá tañan pronto vida, vida y vida!
    25 neutonios capaniles.

    ResponderEliminar
  2. De ti esde luego que no se ha olvidado, Cotta.
    Gracias.

    ResponderEliminar