lunes, 10 de septiembre de 2012

El vídeo de la vergüenza


En época de crisis se muestra lo más feo del rostro político europeo, siempre tentado por las utopías y los radicalismos. Grecia no es peor ni mejor que otros países, sino un ejemplo de un mal crónico del viejo continente: ese mal que consiste en que, cuando los gobernados perciben como incapaces y lejanos y corruptos a sus gobernantes, optan por el radicalismo de cualquier signo, lo que convirtió a Europa en un infierno el siglo pasado.

En este caso, es el Amanecer Dorado (Xrysí Avgí: Χρυσή Αυγή) el protagonista de la vergüenza. Ni siquuiera Gordillo y su panda de saqueadores se han atrevido a tanto como estos neonazis.

Se trata de una verbena en Rafina, en la provicincia del Ática. Primero aparecen unos diputados de Amanecer Dorado pidiendo a los vendedores que no son griegos su licencia para vender. Y luego llegan sus matones y destrozan los puestos de los que no tienen licencia.

El argumento utilizado por los neonazis para justificar su vandalismo es que, puesto que los políticos no lo hacen, lo tienen que hacer ellos.

Dan miedo.

A quienes hay que reventarles el puesto es a los neonazis.


4 comentarios:

Dyhego dijo...

Don Epifanio:
Da miedo, la verdad.
25 neutonios.

Jesús Cotta Lobato dijo...

Un abrazo neutónico, don Dyhego.

Naranjito dijo...

D. Jesús ¿crees que tardaran mucho estos energumenos en tener imitadores por estos lares?
Un saludo.

Jesús Cotta Lobato dijo...

Naranjito, ¡cuánto tiempo! Me alegro de saludarlo. El caso es que yo creo sinceramente que aquí no ocurrirá eso. Ni siquiera durante la Segunda República, cuando los ánimos estaban tan exaltados, cundió aquí el nazismo, sino solo la Falange de José Antonio, que era otra cosa. Reciba usted mi saludo.