viernes, 22 de diciembre de 2017

Demostración de la existencia de los Reyes Magos

La primera prueba es que yo los vi cuando era niño, justo en el momento en que salían del patio de mi casa. El camello de Melchor aún mascaba la hierba que un hermano mío y yo habíamos recogido el día anterior, y Gaspar dio un sorbo a su copita de anís y el resto lo derramó en una maceta que al día siguiente amaneció con resaca la pobre. Y Baltasar se arremangó la túnica para dar un salto impresionante y montar en su camello. Cuando me desperté, descubrí un rastro de oro en el patio.

La segunda prueba es que yo todos los años les pido a los Reyes Magos que mis alumnos empiecen el año con muchas ganas de trabajar y de aprobar. ¡Y siempre me lo conceden! Es cierto que, una semana después de volver de las vacaciones, a muchos se les ha olvidado ese propósito de año nuevo, pero siempre hay alguno que remonta el vuelo a partir de enero.

La tercera y definitiva prueba de su existencia es que los Reyes Magos no son los padres, sino que, en todo caso, los padres son los Reyes Magos. Pero incluso los hijos de los padres que no lo saben reciben por un cauce o por otro los regalos que los Reyes Magos les hacen llegar. Son muchos los padres que encargan a los Reyes Magos regalos para los niños que no tienen padres o que los tienen en la cárcel.

Estas tres pruebas demuestran, a mi entender, su existencia actual.

Además de existentes, los Reyes Magos son convenientes. Para empezar, son personajes históricos y además la mar de simpáticos, porque se negaron a seguirle el juego a Herodes, el asesino de niños.

En segundo lugar, como son tres, traen más regalos que Papá Noel.

En tercer lugar, son de tres razas distintas y, por tanto, muy multiculturales. Si alguna tradición española sirve para integrar a los inmigrantes, ¡son ellos tres!

Y en cuarto lugar, cada año siguen una estrella que los niños y los que aún no hemos matado al niño que llevamos dentro seguimos con toda la ilusión del mundo, nos lleve donde nos lleve.

Por todo ello, os deseo a todos para esta navidad y el año que viene el oro de la prosperidad, el incienso del cariño y la mirra de la salud.

Rin rin.

Feliz Navidad, Merry Christmas, Joyeux Noël, Buon Natale, Kalá jristoúgenna.

jueves, 21 de diciembre de 2017

Feliz Navidad

Fotomural Estándar Huida a Egipto: Jesús, María y José en vidrieras - Temas
En el sueño que envió
el ángel a san José
ya estábamos tú y yo
caminito de Belén.


Que la estrella de Belén os traiga el oro de la prosperidad, el incienso del amor y la mirra de la salud.

Feliz Navidad.

jueves, 14 de diciembre de 2017

Un espontáneo en un café filosófico

La semana pasada, el tema de la tertulia filosófica era la infidelidad. Comenzamos dando varias vueltas a las diferencias entre el amor erótico y los otros amores y, entonces, un señor de unos sesenta años que estaba pintando en el bar donde estábamos, nos oyó decir palabras como "amor", "deseo", "sexo" y, ni corto ni perezoso, se arrancó e irrumpió para proclamar con un vozarrón y sin titubeos y mirándonos fijamente a todos:

-¿El amor? Eso es a los catorce años. Después solo sexo. Y al final, cuando a la mujer le viene la menopausia, se pone encendía y eso es una maldición para el hombre que tenga que satisfacerla.

Y se fue.

Después de eso, discutimos si era preferible confesar al consorte una cana al aire porque tenía derecho a saberlo o si era mejor callarlo para no descargar en él nuestra conciencia; nos dispersamos en torno a la gran cuestión de qué era realmente la intimidad de una persona, si lo que hacía con su cuerpo era más íntimo que lo que hacía con su pensamiento, y si era o no infidelidad fantasear con otra persona, ver pornografía, tontear; y si la fidelidad tal como se entendía (exclusividad sexual) no era más que un disfraz de la posesión o más bien era el custodio de algo hermoso como el amor.

Pero se nos olvidó discutir la veracidad de las etapas y los conceptos de la aseveración de aquel espontáneo que hablaba desde su propia experiencia.


martes, 12 de diciembre de 2017

Por los amigos

;Me he dado cuenta de que actúo con mis amigos igual que ellos conmigo: tiendo a absolverlos siempre que me cuentan algo, porque para regañar ya están sus padres o sus esposas. Pero siempre me atormenta la duda: si a un hijo mío le desaconsejo las borracheras, los cuernos, los porros, la venganza, el enchufe, la recomendación, ¿por qué se los consiento a los amigos que me consultan? Es más, ¿por qué a veces les ayudo un poquitín?

¿Será eso un problema: que por amistad no me quedo en las puertas del infierno, sino que a veces meto un pie dentro?

lunes, 4 de diciembre de 2017

Plegaria

Has hecho a Adán con músculos de liquen y a Eva de flores y diamantes y el mundo con la lágrima que un día vertiste enamorado aún no sabías de qué. Te prodigaste tanto al hacerlo todo, son tan rojos tus frutos, que me olvido de Ti cuando los muerdo, cuando busco un Edén donde no te pasees por las tardes ni me preguntes por qué mordí la manzana. No me acabo de enterar de que sin Ti el Edén se convierte en mi propio infierno.

Aún me esperas dentro de mí -con cuánta paciencia- para que pueda disfrutar contigo del Paraíso aquí y ahora.

Que así sea.

jueves, 23 de noviembre de 2017

Eso es amor

Hablaba yo antes de ayer con una mujer acerca del cuidado que a nuestra edad debemos dispensar a nuestros ancianos padres. Y me dijo:

-Mis hermanas y mis cuñados quieren meter a mi madre en un asilo. Pero mi madre tiene noventa años y yo sé que, si la sacamos de su casa, se muere. La asistenta que la cuida ha dicho que o le pagamos más o se va, y, claro, mis cuñados han visto la puerta abierta para despedirla y mandar a mi madre al asilo. Así que, ¿sabes lo que he hecho? Tú eres el primero al que se lo digo: le pregunté a la asistenta cuánto dinero más quería, y se lo pago en secreto, para que no se vaya.

Eso es amor. Lo demás son tonterías.

El amor no puede morir.

El amor salva no solo a esa madre del asilo, sino a esa hija y, de paso, a mí, que he venido iluminado de su confesión y más amigo de la especie humana.

¡Y, encima, mientras me lo contaba, me invitó a un café!


lunes, 20 de noviembre de 2017

Defectos de verdad

Aquí en el blog es muy fácil maquillarse, mostrar de uno no la imagen real, sino la que él quiere proyectar. Como yo tengo una etiqueta muy surtida de confesiones, me siento un poco obligado a decir que, si no hablo aquí de mis defectos reales, es porque aquí me propongo hablar de cosas bonitas y no de las feas, sean mías o del mundo.  Y cuando digo defectos, no me refiero a esos defectos que la gente, para dárselas de sincero, confiesa y que son más bien virtudes. Que si soy tímido, que si voy con la verdad por delante, que si soy ingenuo, que si voy con el corazón en la mano y claaaaro, se aprovechan de mí... No, me refiero a defectos feos, esos que nadie confiesa porque a veces no es ni consciente de que los tiene. Y no los pienso decir porque me dan muchíiiiiiiisima vergüenza.

Si alguien tiene el defecto de ser rencoroso, susceptible, envidioso, quemasangre, destripagustos, cruel, cobarde, siempre lo acaba disfrazando de ambición, de "perdono, pero no olvido", sutil, nada iluso, reacio al sentimentalismo... De los defectos míos que he descubierto soy bastante consciente y me moriré con ellos. Son mi parte de penitencia en esta vida.

martes, 14 de noviembre de 2017

El fariseo y el publicano

El publicano, en el templo, no osaba alzar los ojos al cielo, sino que se golpeaba el pecho porque era un pecador. En el mismo templo, un fariseo daba gracias al cielo porque él era puro y no como ese publicano.

Dentro de mí hay un fariseo y un publicano. El fariseo ve un mendigo sucio por la calle y se aparta diciendo qué asco, menos mal que no soy como ese. El fariseo se cree que sus hijos son los mejores del mundo, porque, si no lo fueran, no podría quererlos. El fariseo necesita la soberbia para ser bueno, pero sólo consigue ser un fatuo de mil pares de narices al que hay que humillar a cada tanto para que no se suba a la parra.

Me cae mucho más simpático el publicano, que no se aparta del mendigo porque él es también un mendigo; y ama a sus hijos sabiendo que no son precisamente los mejores del mundo: precisamente por eso los quiere, para suplir con su amor lo que la naturaleza o la suerte no les ha dado.

El fariseo se mira al espejo y se gusta, aunque tenga un grano muy feo en la punta de la nariz. Eso sí, ¡menudo ojo tiene para encontrarle granos a la gente!

Qué asco me da a mí ese fariseo y qué dentro lo tengo. Cuando el fariseo se crece, le recuerdo ciertos episodios bochornosos de mi vida que él se empeña en olvidar y en justificar, porque todo lo que él hace tiene que ser bueno y santo.

Me gustaría mandarlo a la porra, pero me temo que sólo morirá cuando yo me muera.

Es su táctica tan refinada, que cuando veo que alguien se comporta como un fariseo me hace decir: "¡Menos mal que no soy como ese fariseo"!. Y así me hace suyo el puñetero.

viernes, 10 de noviembre de 2017

Parece un chiste, pero es verdad

Fragmentos de conversaciones reales.

ELLA: Este verano me quiero ir a la India a encontrarme conmigo misma.
AMIGA: Para encontrarte contigo es más barato irte a una playa solitaria o a un monasterio, que acogen gente que se busca. Pero si lo que quieres es gastarte dinero, vete a Brasil a encontrarte con un brazileiro.

ÉL: Pero ¿cómo puedes defender tú el régimen cubano si allí los homosexuales están perseguidos?
AMIGO: ¡Es que con los pedazos de negras que hay allí ser homosexual es un delito!

ELLA: Yo es que soy daltónica.
AMIGA: ¿Qué colores no distingues?
ELLA: Ah, no, perdón. Quería decir que soy disléxica.

PROFESOR: Esto que subrayo es un acusativo de extensión, y es un complemento circunstancial de tiempo.
ALUMNO: Profe, ¿se llama de extensión porque es muy largo?

MUJER 1: ¿Me compras una papeleta para el viaje de fin de curso de mi hijo?
MUJER 2: Sí, si me das el equivalente para mi perro.
MUJER 1: ¿Tu perro también se va de viaje de fin de curso?
MUJER 2: No, pero está muy malito.

martes, 7 de noviembre de 2017

Tener o ver un sueño

Por una gimnasia mal hecha y en frío, me tiene postrado el lumbago. Los sueños de anoche son traducción de ese dolor, como cuando soñé que tenía una piedra en la cara y era mi brazo dormido.

Primero soñé que, tras volver a mi ciudad como un extraño, dormía en una casa deshabitada que no era mía, siempre con miedo de que entrase el dueño y preguntándome cuánta gente había dormido en aquella cama y desde cuándo no cambiaban las sábanas.

Luego me vi sentado a la intemperie en el alféizar de una ventana de hospital en la quinta o sexta planta y tan estrecho, que me he pasado toda la noche a punto de caerme. En la ventana de al lado, una mujer que estaba en mi misma situación saltó al suelo y no le pasó nada; y su hija, que seguía en la ventana, me explicó que su madre ya había saltado de un piso más alto alguna vez y estaba inmunizada. Ni aun así caí en la cuenta de que aquello era un sueño.

Los sueños son tan reales, que a veces los he confundido con mis recuerdos. Otras veces no los he distinguido de la realidad. Un día, por ejemplo, soñé que mis padres habían comprado una estupenda tarta de chocolate y, nada más despertar, fui a la nevera a verla. Y no estaba.

Con razón los griegos no decían "he tenido un sueño", sino "he visto un sueño". ¡Qué bien recoge ese verbo, ver, esa tremenda sensación de que no es mi subconsciente el que está montando toda esa estupenda tramoya onírica, sino que mi alma, trasladada por sus alas divinas a regiones más altas, asiste a maravillas que luego, al despertar, resultan casi siempre incomprensibles para la razón en este mundo sublunar!

lunes, 6 de noviembre de 2017

Tirarme por la ventana

Yo experimenté en toda su crueldad el dolor físico en una larga noche de hospital, tras el atropello de un coche que me partió la pierna.

Me iban a operar a la mañana siguiente y me tuvieron toda la noche sin darme un maldito calmante, porque, según me dijeron, no podían.

El dolor era tan insoportable que yo me arrancaba pelos del pecho y de las piernas, para sentir un dolor distinto, para que la mente tuviera otra cosa en que pensar. La ventana estaba abierta y yo tenía que lidiar con la idea obsesiva de tirarme por ella. Y mi madre y mi hermana, que velaban las pobres por mí, no sabían cómo calmarme. Hoy sus lágrimas de entonces me parten el corazón.

Si me hubieran dicho en ese momento si quería la inyección letal, yo habría dicho: ¡¡¡¡SÍÍÍ!!!"

Por eso, siempre estaré eternamente agradecido a la medicina paliativa, que no pretende curar, sino aliviar el sufrimiento. Cuanto más invierta el Estado en ella, menos sentido tendrán las voces que piden la muerte para los incurables.

viernes, 27 de octubre de 2017

El supuesto derecho de autodeterminación no cabe en la democracia

En primer lugar, los derechos son individuales, no colectivos. Por tanto, tengo derecho a hablar la lengua que yo quiera, educar a mi hijo en la lengua y las creencias que yo quiera, a publicar en la lengua que yo quiera. Y eso puede ocurrir en cualquier país democrático donde se respetan y garantizan los derechos de cada cual, como ocurre en España.

Pero el supuesto derecho de autodeterminación no es individual, sino colectivo y, por tanto, no es un derecho, sino un atentado contra los derechos individuales de los demás, porque no consiste en hablar la lengua que yo quiera, sino en pretender que mi país se llame como yo quiera, tenga las fronteras que yo quiera y esté compuesto solo por el tipo de gente que yo quiera, o sea, que el país se haga a gusto de unos cuantos. En vez de derecho habría que llamarlo pretensión colectivista uniformadora y exclusivista. Los secesionistas catalanes atentan contra los derechos individuales de todos nosotros cuando pretenden que ellos tienen derecho a cambiar nuestras fronteras y nacionalidades. Y por eso lo tienen que hacer dando un golpe de Estado con las armas que tienen: policía autonómica, los medios de comunicación, escuela y la movilización de talibanes antidemocráticos que pretenden declararme, por la cara, extranjero en Cataluña.

En segundo lugar, si hubiera que votar si un trozo de España se separa de España o no, lo tendríamos que votar todos los afectados, o sea, todos los españoles, y no solo los que por casualidad están censados en ese trozo de España.

En tercer lugar, si reconocemos un supuesto derecho de autodeterminación que afecta solo al territorio donde hay más independentistas, también hemos de reconocérselo a esas zonas de Cataluña donde hay menos independentistas. Así que, si se proclama una república catalana independiente, los no independentistas están legitimados a proclamar otra república independiente no catalanista.

En quinto lugar, la autodeterminación, por definición, solo puede afectar a un individuo, que es el que con su propia voluntad se determina, pero no al vecino. Yo puedo determinarme como catalán o andaluz independiente, pero si mi vecino no quiere, no tengo derecho a exigirle que deje de ser español solo porque yo quiero.

En sexto lugar, los que reivindican ese supuesto derecho no quieren separarse del resto de España porque se sientan diferentes, como dicen, sino porque se sienten superiores. Diferentes somos todos unos de otros. Solo el superior quiere salirse del grupo de inferiores.

En conclusión, el supuesto derecho de autodeterminación es una pretensión antidemocrática que en Cataluña se disfraza de democracia y revolución popular, pero que apesta a fascismo identitario con métodos antidemocráticos y marxistas de agitación popular. En fin, un asco.


lunes, 23 de octubre de 2017

Música e intensidad

Mi hermano Alfonso y yo éramos forofos de Eurovisión desde que tenemos memoria. Estábamos enamorados de un dúo de holandesas que cantaron allá por el año 1976 y que ni siquiera ganó. Nosotros sólo entendíamos de la letra algo así como Asín Esán y la cantábamos sin cesar ante el espejo del baño con una toalla en el pelo cada uno para imitar sus rubias melenas. Nos podíamos pasar así horas, con la ventaja de que, si uno tenía una necesidad escatológica, la podía hacer allí mismo sin dejar de cantar.

Si uno se equivocaba en una sílaba o en una nota, le tocaba una pedagógica reprimenda que soportábamos estoicamente por la música.

Luego, de mayor, he buscado la intensidad de aquellas vivencias infantiles y nada se le parece; si acaso, un poco el alcohol o el deporte intenso. Pero la infancia siempre es mejor: allí la intensidad se consigue porque Dios quiere, no porque uno haga esfuerzos por alcanzarla.

miércoles, 18 de octubre de 2017

Otra parida de la paridad

Pues he aquí que en cierto organismo de cierta universidad española la Ley de la Paridad obliga a que el voto de sus miembros sea paritario. Y dado que se presentaron tres candidatas y un candidato, este tuvo que ser obligatoriamente votado y, claro, retiró su candidatura porque, como persona inteligente y buena que es, quiere ser elegido no por lo que tiene en la entrepierna, sino por lo que tiene en la cabeza.

Así que la Ley de Paridad se ha cargado el concepto mismo de democracia, que consiste precisamente en que se presente a representante quien quiera y en que el representado vote a quien quiera. El color de la piel, la entrepierna, la edad, la religión, etc ni pincha ni corta en este derecho a votar y ser votado que la Ley de Paridad está conculcando.

viernes, 13 de octubre de 2017

La parida de la paridad

Veo un cartel publicitario de Lidl, que merece todos mis respetos,  pregonando lo fresca y natural que es la fruta que venden. Para ello salen en el cartel cuatro personas. ¿Y a que no adivináis de qué sexos son? Dos hombres y dos mujeres, con sus supuestos nombres y todos agricultores.

Dudo que, realmente, en el campo español trabajen tantos hombres como mujeres, pero, si es así, ¿por qué va a ser ese campo más deseable que otro en que trabajen más hombres que mujeres?

He buscado el cartel en la Red, pero solo encuentro una foto de mala calidad en la que salen seis personas, cuatro hombres y dos mujeres. Pero los que he visto en la calle son solo de cuatro.

Lo curioso es que, mientras que los dos hombres sí podrían pasar por agricultores, por su piel curtida o su aspecto, las mujeres no parecen dos serranillas, sino más bien dos modelos disfrazadas de agrarias. Los dos hombres no son apuestos, pero ellas sí que son guapas. Ahí ya no hay tanta paridad.

Pero donde hay menos paridad es en el peso del producto que los cuatro llevan. Un hombre lleva una cajita de champiñones y el otro un racimo de plátanos, mientras que una mujer lleva, agárrate a la silla, un pedazo de canastón lleno de limones y la otra una gran caja de tomatess.

Pues eso, que, al final, la paridad lo que viene a traer son agravios, injusticias y, sobre todo, estupidez.

miércoles, 11 de octubre de 2017

Desnudarse en un poema

En este archivo sonoro leo dos poemas de mi segundo libro de poesía, Menos la luna y yo. Los recoge un blog muy recomendable con archivos sonoros de poetas actuales de toda España. Dicen que Federico García Lorca declamaba maravillosamente. No es mi caso, pero por si alguien está interesado en oírme leer mis poemas, heme aquí.

Dichosos días aquellos en que se te abren los cielos y uno se convierte en profeta de la belleza escondida y la suelta en versículos de oro para hacer más bello el mundo. Para los que no hemos recibido del cielo la merced de la unión mística, el trance poético es la más sublime experiencia que, junto con la amorosa, puede alcanzar un simple mortal.

Siempre digo que la poesía es la única manera elegante de desnudarse. Es buena recomendación para aquellos a los que nos gusta la desnudez.

lunes, 9 de octubre de 2017

Cosas que se parecen a la muerte

Hoy he soñado que, en un largo pasillo, un soldado joven me tenía que disparar. No había odio en él. Puso el cañón del fusil en mi cabeza y yo notaba cómo dudaba si apretar el gatillo o no. Cerré los ojos en el sueño y entonces desaparecieron él y el pasillo, pero no el contacto del cañón en mi frente. Y yo me decía: "Si esto es un sueño, tendría que haberme despertado ya. ¿Por qué tarda tanto el soldado en dispararme". No sé cuántos segundos reales duró aquel tormento de la inminencia de la muerte. Lo que sí sé es que los segundos en los sueños transcurren de otra manera, y que el pensamiento es más obsesivo y cósmico y consistía en una pregunta angustiosa en la oscuridad: " Esta muerte no va a ser como yo imaginaba. Yo creía que la muerte iba a ser como ese momento en que el cerebro se duerme y se me cae el brazo o se me abre la boca y el pensamiento comienza a introducir elementos surrealistas. Y ahora resulta que va a ser otra cosa: voy a estallar como una supernova. Pero ¿dónde se irá mi información? ¿Desapareceré yo para siempre? ¿Sentiré cómo me vuelan los sesos? ¿Se seguirá moviendo mi cuerpo cuando ya esté descabezado?". Y entonces me desperté en el lugar más agradable del mundo.

Espero que, cuando me muera, despierte en un lugar aún mejor.

miércoles, 4 de octubre de 2017

Converso, de David Arratibel

Siempre me han interesado mucho los conversos. Hay algo misterioso en sus vidas. De pronto viven un suceso inexplicable que se les graba para siempre y dejan de ser los mismos. Por eso he visto con tanto interés la película de Arratibel, Converso, que recomiendo encarecidamente, porque va directa contra el tabú absurdo y creciente según el cual de religión no se habla y mucho menos de lo que Dios significa para cada uno. En esa película los miembros de la familia del director hablan sin tapujos de algo tan íntimo y valioso como su conversión y su relación personal con Dios; y el director, que es hijo, hermano o cuñado de ellos, lo hace sin manipulaciones y con un amor grande y bello por todos ellos, aunque sin compartir esa creencia, lo que hace su amor aún más bello.

Una de las virtudes de la película es que, además de revelar el misterio de varias almas, reconcilia a la familia mediante el amor y la música.

En un momento emblemático de la película el director y su madre se sinceran. Ella lamenta lo violento que se ponía él cuando los oía hablar de Dios y él explica lo excluido que se sentía de ellos en esos momentos, cómo los veía inmersos en un grupo con unas reglas y dogmas que él no compartía ni entendía. Y entonces la madre le pide perdón y le dice: "Hemos actuado con soberbia".

Perdón si hablo de asuntos tan personales de una familia que no es mía. Lo hago porque el director me invita a ello, y lo hago con toda la simpatía hacia esa familia. Lo que quiero decir es que la madre desarma al hijo con esa petición de perdón. El hijo, si es listo y bueno, que parece serlo, debería preguntarse si no actuó él también con soberbia, es más, si el soberbio era él y no ellos, porque ellos no podían evitar hablar de Dios, que de pronto llenaba sus vidas, y él, en vez de hacer el esfuerzo de entenderlos como eran, reaccionó violentamente contra ese cambio. ¿Habría reaccionado del mismo modo si de pronto todos los miembros de su familia se hubieran vuelto forofos del yoga, el deporte o el alpinismo? Seguramente no, porque lo que en este mundo parece enfermizo o poco moderno o impropio no es el yoga, el deporte o el alpinismo, sino la religión y, más en concreto, la católica.

Me enternece la hermana menor cuando recibe como un chaparrón de agua fría los pensamientos de su hermano, bien intencionados, pero discordes con los de ella, que, no sé por qué, no replica, quizá porque quiere mucho a su hermano mayor o porque no sabe cómo responder o porque cree que es mejor no hacerlo. El caso es que su silencio es tan enternecedor, que, al menos esa es mi impresión, se vienen abajo todos los argumentos del hermano. Y creo que lo mejor es que el hermano lo sabe, lo cual lo honra.

Olé, pues, por el director que tiene la elegancia, la valentía y el arte de afrontar todo eso y llegarnos al corazón y a la cabeza.

Bravo, Arratibel.

domingo, 1 de octubre de 2017

Un sueño, un ángel y Cataluña

Esta noche he soñado dos cosas: que volvían a mi casa las hormigas y que el rey Felipe le daba a Mariano Rajoy varios consejos, uno de los cuales era ser menos funcionario y más representante de lo que España significa.

El primer sueño se debe, supongo, a que ya no sé cómo hacer para echar las hormigas de mi casa, y el segundo se debe, supongo también, a mi preocupación por lo que están pasando en esa parte de mi amada España que es Cataluña.

Un referéndum solo lo puede convocar la persona que representa a todos los afectados por el referéndum. Dado que los afectados por un referéndun a favor de la secesión de Cataluña somos todos los españoles, deberíamos votar todos los españoles. Si Cataluña se separa de España, yo seré extranjero en Cataluña y mi país se verá reducido en territorio, gente y potencial. Por tanto, tengo derecho a decidir.

España es de todos los españoles. No hay territorios de España que sean de unos españoles más que de otros. Siempre me he opuesto de modo furibundo a algún andaluz que otro (por fortuna, pocos) que, contagiado del regionalismo exclusivista de otras comunidades, exige que los puestos de funcionarios de Andalucía sean solo para andaluces y no para los que, por ser mejores, aprueben las oposiciones, sean de de donde sean.

En fin, rezo hoy por España al ángel de España, aquí en una estampita del 19000.

Un abrazo a todos.

lunes, 25 de septiembre de 2017

Correr a cuatro patas

Mi hermano Alfonso y yo siempre hemos sido rápidos y ágiles. En la academia de judo dejábamos estupefactos a todos porque éramos los más veloces corriendo a cuatro patas. Nos resultaba tan sumamente fácil correr así que no entendíamos que los demás fueran tan torpones.

También éramos muy buenos girando el brazo como una hélice. Llegaba un momento en que parecía que teníamos diez brazos en vez de uno.

Este verano en la playa quise impresionar corriendo a cuatro patas. ¡Y vaya que los impresioné! Pero desde entonces tengo la muñeca dislocada.

domingo, 17 de septiembre de 2017

Infantilina

Yo pasé de niño una depresión infantil que me obligaba a confesar con pelos y señales a mis padres el más recóndito e inconfesable de mis pensamientos. Si no, no me quedaba tranquilo. ¡Lo que mis padres sufrieron conmigo y la paciencia y el cariño con que me trataron!

Esa manía de contar todos mis pensamientos la he achacado siempre a mi natural escrupuloso hasta que un psiquiatra me ha explicado que eso es habitual en las depresiones infantiles. Yo tenía una sed de pureza más grande que yo mismo y necesitaba matar mis demonios echándolos fuera. Esos demonios los alimentaba el ambiente enrarecido de mi clase, que prefiero no contar aquí, mientras el maestro, un viudo depresivo, no se coscaba.

Si se pudiese concentrar en una pastilla las ganas de vivir y de ser feliz que tiene un niño a pesar de sus demonios y el acoso de su clase, podríamos curar todas las depresiones, aunque sean de caballo.

Ahora lo llaman resiliencia.

Y lo que son las cosas: hoy me he dado cuenta de que esa sinceridad en que sin querer  me ejercité de niño me ha venido de perlas en muchas circunstancias de mi vida. ¡La de cosas que uno aprende de sí mismo con el tiempo! ¡Y lo que nos queda!

lunes, 11 de septiembre de 2017

Gracias, Orosia

Muchas veces he buscado la manera de dar las gracias a Orosia, la profesora que, sin conocerme apenas de nada, me salvó el pellejo una noche en un pueblo de Jaén cuyo nombre ni recuerdo.

Resulta que calculé mal los horarios y cuando me monté en el autobús creyendo que iba a Jaén, me enteré de que me dejaba en un pueblo de la provincia, cuando he aquí que se sentó a mi lado Orosia, a quien conocía de un curso de educación sexual del CEP de Jaén para profesores.

Una de las actividades del curso consistió en que yo tenía que defender ante un grupo de mujeres la superioridad del sexo masculino y sus genitales frente al femenino. Los argumentos que, con tal de resultar convincente, di en ese momento hoy me habrían llevado al paredón. Pero Orosia, que fue quien los tuvo que soportar, no me lo tuvo en cuenta cuando me encontró en el autobús. Antes bien, viendo que el autobús me iba a soltar de madrugada en un pueblo desconocido y pequeño, me ofreció una habitación de su piso para pasar la noche, y así me salvó de andar errabundo por un pueblo dormido y cerrado hasta el amanecer.

Siempre he pensado que no le agradecí lo bastante gesto tan noble y desinteresado y, como no tengo manera de encontrarla, se lo agradezco desde esta atalaya de la Interred por si me oye desde algún lugar. Y esto es lo que le digo:

Orosia, amiga, nunca fue caballero de damas tan bien servido. Recibid mi beso, mi gratitud y mis oraciones. En mi próximo libro de poesía os dedico un poema.

sábado, 9 de septiembre de 2017

Donde abro otra vez la casa y leo dos poemas

Me alegro mucho de volver a esta casa donde con gusto recibo al caminante internáutico. Todos son bienvenidos, pero especialmente quien venga con el corazón en la mano, los pies en el suelo y los ojos mirando a las estrellas. In terra pedes, ad sidera visus. Pero, vamos, que si alguien tiene los pies en el cielo y la cabeza en la tierra, también lo recibiré muy bien.

De todas las cosas que me propuse hacer en verano no he hecho ni la mitad. Por ejemplo, no he subido al Jabalcuza ni he compuesto la canción, aunque sí el poema a mi ángel.

Eso sí, he terminado mi novela y ahora la estoy revisando. Qué largas son las novelas y qué corta es la vida.

Clasificando los libros de mi biblioteca este verano, me he dado cuenta de que me moriré sin leerlos todos.

Aquí podréis oírme dos poemas de mi libro de poesía A merced de los pájaros. Los recoge un blog muy recomendable de poesía recitada por poetas de toda España y ahora reunidos en archivos sonoros a disposición de quien quiera oírlos. Tengo el gusto y el honor de estar entre ellos.



Con esos dos poemas inauguro el curso.

Espero que empecéis el vuestro radiantes de sol, cervezas, amor y poder.

Un abrazo grande a todos.

viernes, 30 de junio de 2017

Feliz verano

 Me hace mucha ilusión este verano porque voy a:

a) Componer la letra y la música de una canción que he soñado que tengo que componer a mi ángel para colgarla en youtube. Fue un sueño numinoso que me reveló incluso algunos versos. He vuelto a tocar el teclado y la guitarra a ver si se me ocurre alguna música digna. Pero he comprobado que, dedicado a la escritura, he olvidado lo poco que sabía de música. Si alguien me regala una buena música para octosílabos, yo pregonaría su autoría y se lo agradecería.

b) Disfrutar más conscientemente de los dos crepúsculos del día: el primero, cuando reboso de ilusión, ideas y energía, y el segundo, cuando me siento en la terraza a contemplar el paisaje y a beber una cerveza fría.

c) Subir una mañana muy temprano a la cumbre del Jabalcuza. Llevaré unos prismáticos y una libreta y alguna fruta. Me sentaré en la cima a hablar con Dios y a darle gracias por haberme regalado el universo y hacerme similar a él, que es anterior a todo. Es un regalo más grande que yo mismo.
d) Escribir poemas frescos y frondosos, donde sean protagonistas los árboles, el agua y, si cuadra, yo en buena compañía.

e) Acabar mi novela.

f) Disfrutar de todas las piscinas donde me inviten y bañarme en todas las playas y brindar en todas las barbacoas y acabarlas todas con un nescafé frappé.

g) Y, en fin, celebrar la vida cada vez que me acuerde de la muerte. Me acuerdo tanto de esta que me paso el día celebrando aquella.

Os deseo a todos un feliz verano. Rezaré por vosotros. Y espero encontraros en algún sueño de noche de verano.

Os dejo con una foto que me hizo mi hermano David en una cascada de Cucayo.

lunes, 26 de junio de 2017

Antígona

Leyendo Antígona con los alumnos, me pasan dos cosas maravillosas: me elevo en alas de lo sublime y, a la vez, me lo paso en grande, porque no hay frase de la obra que deje indiferente a nadie o no suscite controversia o no sugiera mil ejemplos, lo cual es una gozada para un profesor como yo que disfruta ilustrando con ejemplos prácticos los principios generales.

Todos los personajes tienen su parte de razón y, precisamente en llevarla hasta sus últimas consecuencias caiga quien caiga consiste su sinrazón. Eso sí, de todas las razones y sinrazones, las de Antígona son las que suscitan todas mis simpatías.

Creonte utiliza con ella la falacia ex populo, consistente en dar por falsa una opinión porque nadie la comparte. Y Antígona, en vez de rebatirla afirmando que una mayoría se puede equivocar frente a un solo hombre, prefiere afirmar que la mayoría lo ve como ella, pero que calla por miedo y así la vuelve contra él y la convierte en fundamento de la democracia.

En medio de discusiones sobre la justicia y la ley, los hombres y los dioses, la tiranía y la democracia, el placer y el deber, el hombre y la mujer, etc. resuenan como un chorro de sangre esas palabras dolidas de Antígona a las puertas de la muerte, las únicas que nos permiten adivinar que su amor por su prometido Hemón, era sincero y espontáneo:

“Ah queridísimo Hemón, ¡cómo te deshonra tu padre!”.

jueves, 22 de junio de 2017

Lo que pasó en una clase de latín

Lo que ha pasado en la clase de latín de un compañero.

Dice el profesor de latín, para probar a los alumnos:

-El plato favorito de los romanos eran las patatas con tomate.

Silencio absoluto, de indiferencia o de aprobación ante la indiscutible autoridad del profesor.

-¿No tenéis nada que decirme al respecto?

Otro silencio.

Al final una alumna dice:

-Eso es imposible, profesor. ¿Y con qué lo iban a freír?

lunes, 19 de junio de 2017

La belleza de lo masculino

Quejábase hace poco una mujer de lo mal que ponía sobre el sofá las telas su marido y otra dijo encantada que prefería que su marido las pusiera regular, porque llevaría muy mal que su marido fuera más femenino que ella.

Me gustó a mí aquella mujer.

El otro día en clase, Calipso, una chica, por una bajada de tensión o algo, empezó a dar señales de ir a perder el sentido y ninguno atinaba cómo ayudarla a incorporarse para llevarla al baño y, entonces, Hermes, corpulento, grande, de brazos grandes y generosos, la tomó en brazos como si fuera una pluma y la sacó con elegancia y presteza fuera de clase. Era aquella una imagen muy poderosa y caballeresca.

San Jorge siempre matará al dragón para salvar a la princesa.

sábado, 17 de junio de 2017

El poema de la semana

Desde el homérico “Como las hojas de los árboles, las generaciones de los hombres”, el tempus fugit preside la literatura de todas las épocas y lugares, porque parece que no pasa, pero pasa. Este poema lo hace sacándole todo el jugo a una sola palabra.

CANCIÓN DE LOS ADIOSES
Adiós, amigos, que os marcháis de pronto.
Adiós, amigos, si soy yo quien parte.

Adiós, también, por cada vez que vuelve
-ignoro desde dónde- este lenguaje.

Y adiós, adiós por cada vez que olvido,
de tanta luz, las fechas y aun mi sombra.

 Adiós es la palabra irremediable
en medio de nosotros y las cosas.
(Antonio Moreno)

lunes, 12 de junio de 2017

Con poetas y Daniel Cotta en Jerez de la Frontera

Estuve el sábado pasado en Jerez de la Frontera en la presentación del maravilloso Como si nada, de mi hermano Daniel Cotta, en la colección DKV, de José Mateos, espléndido en su acogida con nosotros. Fuimos José Julio Cabanillas, mi hermano Daniel y yo. Allí pasé una velada poética maravillosa que incluyó sesión de foto de honor con El Chule y oda al Huevo Frito.

Conocí en persona a poetas como Raúl Pizarro, Pilar Pardo, Antonio Apresa, Ricardo Rodríguez, Margarita Bermudo, Julia Bellido... Enrique García-Máiquez no estuvo, pero véase aquí que se leyó el libro a la misma hora en que nosotros lo oíamos recitar.

Vi la iglesia de San Miguel, con el magnífico retablo de Martínez Montañés. No pude verla con detalle, porque se celebraba allí una boda. Una soprano cantaba el Ave María guaraní de Ennio Morricone. Un invitado a la boda, enchaquetado, se tomaba un café fuera de la iglesia, móvil en mano y torrándose al sol. Me dieron ganas de decirle:

-Oiga, invitado a la boda, sea digno de los novios. ¿Qué hace usted esclavo de la inmediatez, leyendo mensajes seguramente irrelevantes, sudando la gota gorda, en vez de darse un sublime baño de música, Dios y belleza en ese magnífico templo donde además hace mucho fresco?

Os dejo con este soberbio poema de Daniel Cotta:

¿Qué ojos me pongo para ver la luna?
Es que se me ha posado en la ventana
y yo no sé qué hacer,
ni qué decirle.
¿La miro o no la miro?
¿La cojo con la mano o con un verso?
Mejor quedarse mudo,
no asustarla,
que cante su canción de plata y sueño
y dejarla brotar de su crisálida.
¡Silencio, está en mis ojos!
¡Si se quedara en mi ventana, quieta!
¡Si durase!
¡Si pudiera no irse para siempre!

domingo, 11 de junio de 2017

El poema de la semana

Este poema me gusta porque revela que cada costumbre revela un profundo pensamiento, una perspectiva vital, porque es mucho más que una costumbre. Lo grandioso del hombre es que lo que hace va más allá de sí mismo.

ALGUNAS COSTUMBRES
Siempre que paseamos por la playa
andamos por el borde donde rompe la espuma:
¡que tierra y mar se abracen
y rieguen nuestros pies con su alegría!

Y siempre que salimos por una ciudad nueva
nos gusta ver su iglesia más antigua:
allí donde más hombres, a lo largo del tiempo,
han sentido los límites del mundo
y han llamado a las puertas de la gloria más alta.

Y siempre que acabamos de limpiar nuestra casa
tenemos que encender todas las luces,
para que quede claro
que empezamos de nuevo nuestra vida.

Y siempre que nos vamos a la cama
nos gusta asegurarnos de que todo está a oscuras
y que nos vamos juntos al abismo.

De Una luz en el tiempo de Carlos Javier Morales Alonso.

lunes, 5 de junio de 2017

El caballero criticado por serlo

El otro día en el bar, mientras tomaba un café, me llega esta conversación de tres hombres y dos mujeres, con pinta todos de funcionarios en su descanso.

Uno de los hombres hizo un comentario subido de tono referente a la fisiología masculina y, abundando en el tema, interpeló a uno de los varones. Pero este, con un gesto y un comentario, rehusó hablar del asunto porque había damas delante. Y he aquí que una de las mujeres lo llamó machista y, para mi sorpresa, el supuesto machista se calló.

¿Desde cuándo son machismo las formas?

Me dieron ganas de decirle al caballero tildado de machista lo elogiosísimo que era que los vulgares lo llamaran machista por eso.

miércoles, 31 de mayo de 2017

Ancianos aparcados

El otro día, al salir del trabajo, asistí a una escena curiosa. Bajo un árbol, dos mucamas hispanoamericanas habían aparcado a sendos ancianos en silla de ruedas y ellas, sentadas en un banco, charlaban animadamente entre sí intercambiando vídeos o datos de sus móviles.

Los ancianos estaban bien cuidados, limpios y en su paseo matinal. Sus hijos o ellos tenían el dinero suficiente para pagarse una mucama. El barrio en que los vi es bueno. Estaban disfrutando de su jubilación, aunque sea en silla de ruedas. Entonces, ¿por qué me pareció tan triste la escena?

Quizá porque sé que algún día yo estaré como ellos. Ya no dirigiré: me dirigirán y, encima, pagaré por eso y tendré que estar agradecido de no estar, como otros de mi edad, en cama o criando malvas. Se sentará mi mucama a hablar con su colega (“Mi viejo tal y cual” “Pues el mío…”).

Lo único que puedo hacer ahora para que mi final sea un poco más feliz es ganarme desde ya el amor de todos los míos. Quererlos no me garantiza un final más feliz, pero menos me lo garantiza no quererlos.

domingo, 28 de mayo de 2017

Poema de la semana

A mi entender, este poema viene a decir bellamente dos ideas inteligentes: la primera es que el Dios cuya muerte anunció Zaratustra era solo una acepción de Dios, y la segunda es que, hoy más que nunca, creer es un salto al vacío.

Un Dios que se concibe ya no es Dios.
Un Dios a su medida, prueba y número,
se inventó la razón, para negarlo.
El Dios gramatical, el Dios monarca,
el Dios descrito en libros imponentes,
el Dios de los filósofos, ha muerto.
Vive el Dios de la fe, el Dios oscuro,
el que acaricia, exige, siembra, duele,
y no sabes si fue verdad o un sueño.

José Mateos (La niebla)

viernes, 26 de mayo de 2017

Con los cristianos coptos

Toda mi simpatía y mi corazón para los coptos de Egipto en este día triste.

Oídlos y vedlos cantar aquí en la Iglesia de la Cueva. Lo que más me impresiona de ellos es su valentía, que los hace bellos; su capacidad para el perdón, que los hace admirables; su perseverancia en una tierra que los discrimina y en la que llevan cantando a Cristo siglos antes de la invasión musulmana. Pero lo que los hace más queridos para mí es que el Dios que ellos adoran ama al hombre, porque, antes que verdad y poder, es amor y misericordia.

Aquí los tenéis cantando para todos los que, desde Londres a Egipto y a cualquier parte del mundo, han muerto a manos de los blasfemos que matan en nombre por razones ideológicas disfrazadas de religión.

jueves, 25 de mayo de 2017

Pedagogía de urgencia

Recuerdo que de niño estaba en la playa y vi flotando en el agua lo que a mí me pareció un globo bastante feo y alargado y de boca grande, pero, al fin y al cabo, un globo con el que jugar. Cuando lo cogí del agua y lo fui a inflar, mi padre me ordenó que lo tirara. Ante mi estupor por esa orden, mi padre me dijo algo que me quitó para siempre las ganas de globos flotantes en el agua y que a ver si logro poner en pie:

-Eso es una tripa que se ponen los viejos en el pito para hacer pipí.

Papá, nunca te daré bastante las gracias por aquella estupenda e improvisada explicación que mis siete u ocho años entendieron a la perfección.

Desde entonces me han parecido feísimos los condones.

lunes, 22 de mayo de 2017

Gregorio Prieto y España

Vengo de ver en Valdepeñas la magnífica fundación con la colección de pintura de Gregorio Prieto, que recomiendo vivamente. Suyo era el más famoso retrato de Federico García Lorca.

Como García Lorca, Gregorio Prieto era patriota, católico y homosexual. Hace unas décadas, las dos primeras etiquetas eran gloriosas (al menos para una parte de España) y la otra un oprobio que había que ocultar. Ahora es justo al revés: las dos primeras son oprobiosas y la tercera un timbre de gloria. A ver si ese timbre hace de portavoz del talento artístico de Gregorio Prieto.

El otro cuadro que aquí os traigo es una bella manera de mostrar el amor a España. Debería figurar en sellos, monedas y billetes. Todo en ese varón de ojos grandes es núbil, incluso su manera de abrazar a la estatua. Pero luego uno sospecha que la relación entre él y lo que la estatua simboliza va más allá de lo erótico y sensual. Tampoco es una relación filial. Entonces, ¿qué es? El varón de grandes y bellos ojos nos está mostrando con la Dama de Baza (que parece tener también algo de la Dama de Elche) y con su desnudez su identidad cultural y personal, su íntima manera de sentir, y todo eso ocurre de una manera, por así decir, española, incardinada en una corriente histórica, cultural y sentimental que afecta hasta los tuétanos.

Siempre me ha gustado la gente de perfil personal y antitópico. Os invito, pues, a Gregorio Prieto.

sábado, 20 de mayo de 2017

El poema de la semana

En esta época nuestra donde no se valora lo que no se ha elegido, la figura del padre anda en descrédito. Este poema me gusta porque muestra cómo el descontento del hijo hacia el padre no era un problema del padre, sino del hijo.

HISTORIA DE AMOR
Pero me fui cansando.
                                   Te quedaste
en eso, lejos, antes,
algo que hay que esconder porque es mejor
que no vean los otros.

Y miré hacia otro lado.

Aunque sé que te hacía
falta, daba lo mismo.

                                    Era incómodo
saberte siempre cerca
(cómodo como un cambio de postura
en el sofá, o el lado más fresco de la almohada):
servicial, a la hora
exacta. Con dinero.

Y supe aprovecharme.
                                 
                                    Te enfadabas, 
pero nunca era grave, y además
volvía fácilmente a lo de antes.

Cuántas veces sí pude
pero luego mentía…
                                 Cuando quise
darme cuenta, era tarde.

Nunca te dije nada
que merezca la pena que recuerdes,
y aunque no es tiempo ya, sé bien cuánto te debo.

Contigo he sido injusto
como tan solo puede serlo un hijo.

Rodrigo Olay (La víspera, leído en la antología de poemas al padre Tu sangre en mis venas)

miércoles, 17 de mayo de 2017

Caramelos de violeta

El otro día una alumna mía, que en clase llamamos Juno, nos trajo unos caramelos de violeta en una bolsita muy mona y bien presentada y los puso en la mesa para todos. Le pregunté si era por algún motivo especial y me dijo que no.

Me pareció muy bonito precisamente que no hubiera un motivo especial. Eso significaba que lo especial éramos nosotros, aquellos a los que ella quería agradar con ese gesto, aquellos por los que valía la pena hacer algo especial.

Hay personas que, allá donde van, con su malos humos, sus malas palabras, sus malos sentimientos y malos olores, producen sufrimiento a su lado; otras hay que, aunque no llevan el sufrimiento, lo consienten a su lado. Y otras que, como Juno, ni lo llevan ni lo consienten, sino que traen consigo aquella primera edad de oro en que no había muerte ni dolor, cuando la libertad se usaba para el bien, y el bien era para la libertad; cuando no había que castigar a la Tierra para sacarle el fruto; cuando Adán y Eva aún no habían mordido la manzana y paseaban con Dios por el Paraíso.

Gracias a Juno y a tantas otras personas por traer consigo la edad de oro con sola su presencia, por no consentir dolor a su lado, por irradiar luz y derrochar simpatía. Gracias a ellas, cuesta menos trabajo levantarse los lunes por la mañana.

domingo, 14 de mayo de 2017

Portugal en Eurovisión 2017 y la Virgen de Fátima

Ayer fue un día grande para nuestro país vecino: el Benfica fue tetracampeón, Portugal ganó Eurovisión por vez primera y con diferencia, y fue el aniversario de la aparición de la Virgen de Fátima a los tres pastorcillos. A lo mejor la Virgen ha querido mimar un poco a Portugal regalándole en su día esos dos triunfos. Si es así, celebro el buen gusto de la Virgen.

En cuanto a la canción de España, en vez de pagar nuestra decepción con el representante, el cual hizo lo que pudo con lo que tenía, hay que preguntarse quiénes han sido los mediocres que han elegido para representarnos una canción tan mediocre. Elegir la mediocridad para representarnos es un insulto a los representados, con la de talento y estilos musicales que hay por estos pagos.

Bueno, amigos, los euroforofos como yo estamos de enhorabuena: han triunfado el buen gusto y la calidad. Me alegro por Eurovisión y por Portugal.

Aquí os dejo con un vídeo en el que Miguel Lambertini pide antes del sábado a la Virgen "ganhar os dois", o sea, que gane el Benfica en el fútbol y Salvador Sobral en Eurovisión.

lunes, 8 de mayo de 2017

El pretérito imperfecto infantil y un poema mío en boca de Sánchez Dragó

No sé qué nombre tendrá este uso del pretérito imperfecto, pero les presento a ustedes a Su Majestad el Pretérito Imperfecto Infantil.

Por ejemplo, “¿Vale que yo era un monstruo con brazos de hierro y tú venías a perseguirme dentro del volcán? Entonces yo te pegaba con mi brazo de hierro y tú…”.

¡Qué época tan gloriosa aquella en que el juego consistía en cierto modo en devolver a la realidad lo que ya había sido escrito en un libro glorioso del pasado!

Los niños estábamos, cuando jugábamos, salvando Ilíadas de la nada.

Para despedirme, os dejo con este programa de Fernando Sánchez Dragó (Libros con uasabi). En el minuto 53 lee un poema magnífico de Miguel d'Ors y en el 55'15 uno mío, sacados ambos de la antología de Enrique García-Máiquez Tu sangre en mis venas, con poemas al padre de muchos poetas.

Figurar con Miguel d'Ors en boca de Sánchez Dragó ha sido para mí la alegría de la semana. Aún no sé si es este un regalo de mi padre desde el cielo o un regalo que le han hecho a mi padre desde la Tierra.

sábado, 6 de mayo de 2017

El poema de la semana

Ahora que el Dios cristiano no está de moda, es cuando uno se da cuenta de que las modas son una tontería.

DESMITIFICAR
Alma mía, tendrás que corregirte:
a cada rato sales de la historia.
¿Quién es Ese que te habla entre dos cirios?
Ama mía, tendrás que corregirte:
te ha dado por creer en tu existencia.
Te pasas largas horas de rodillas
delante de lo Eterno: a tus espaldas
los procesos histórico-sociales.
Alma mía, tendrás que corregirte.

José Miguel Ibáñez Langlois (Oficio)

lunes, 1 de mayo de 2017

Dos alumnos sueñan conmigo

Como les tengo dicho que yo soy también lo que hago en los sueños de los demás, dos alumnos me han revelado con vergüenza un sueño que han tenido conmigo pero en el que hacían de malos.

El primero es de mi alumna Eco. Ha soñado que allanaba con varios más mi morada y yo no podía echarlos.

El segundo es de Leónidas. Soñó que dejaba yo en la mesa del profesor el dinero recaudado para una excursión y él, aprovechando que salí un momento de clase, me lo quitaba.

Me ha conmovido el sonrojo con que ambos me lo contaron, como si el solo hecho de soñarlo ya los hiciera culpables. Y les he dicho:

-No os preocupéis. Esos sueños demuestran lo buenos que sois, porque soñamos con lo que tememos y nos preocupa y a vosotros os preocupa convertiros en malas personas. Si un sueño en que cometes un delito es para ti una pesadilla, es porque en la realidad eres honrado y bueno y lo que más te horrorizaría es dejar de serlo.

Creo que se han quedado contentos de habérmelo contado.

sábado, 29 de abril de 2017

El poema de la semana

Cuánta tradición literaria, cuánta psicología amorosa y cuánta simpatía humana rebosa en ese sencillo poema.

Un abrazo a todos.

 Amore

Iré si quieres,
pero me temo
que no quieras.

Iré si quieres,
pero si no quieres,
también iré.

Iré por si acaso
quieres,
por si acaso, iré.

Iré, ya voy,
corro como el viento,
¿dónde estás, amore?

Ángel Guache (Su realismo)

lunes, 24 de abril de 2017

El silencio del templo

Aquí estoy bajo la luz cenital de la iglesia de los Mártires en Málaga. Viernes Santo por la mañana. Iba con chaqueta y corbata porque acompañaba a siete mujeres con mantilla.

La luz rebota en mi calva y me transparenta las orejas y mi hermano inmortalizó el momento. Casi casi estoy a punto de levitar.

Hay algo sublime en los templos y en la oración. Mi duda constante acerca de si al orar me está escuchando alguien pierde importancia cuando pienso que, exista o no Dios, lo que hace grandioso al ser humano es precisamente tener conocimiento de lo divino o de su posibilidad. Vivir en esa posibilidad es lo más lejos que yo puedo estar de la materia.

Aun cuando Dios no exista, me salva de lo soez.

sábado, 22 de abril de 2017

El poema de la semana

Como mañana es el día del caballero san Jorge, que viene a liberar de lo feo, lo grosero y lo soez a la doncella, os traigo este poema sublime.

Feliz Pascua de Resurrección a todos.

MÁS ALLÁ
                                      Para Ana
Al volver de la muerte, algunos lo han contado:
hay un túnel de luz y un campo en flor
y un amigo, una abuela o un Guardián esplendente.

O dos que, cuerpo a cuerpo, al abrazarse,
fFlotan en una playa, salpicados de sol,
y una nube varada encuentran en sus labios.

O de pronto un almendro, al volver una curva,
puesto en pie y escribiendo
con su intacta blancura
cosas que ni él ni yo comprenderemos.

La luna que de pronto va y se ríe.

O tus dos ojos grises, mientras abres la puerta:
-Papá, al teléfono.
                          Y una corte de monos, enanos y princesas
y un san Jorge que trota
por la pizca de luz que, de una tierra rara,
al entrar, en tus ojos, te has traído.

José Julio Cabanillas (En lugar del mundo)

lunes, 17 de abril de 2017

Un largo etcétera, de Enrique García-Máiquez

Las tres palabras que mejor definen el encanto del cuaderno de bitácora de Enrique García-Máiquez son gracia, agudeza y simpatía.

Gracia en la forma, en la sencillez que derrama en sus textos, sin afectación ni falsos pudores ni rimbombancias. Agudeza por los giros de ideas, la sutileza y los matices que descubre. Y simpatía porque no hay sitio para rencores, sornas y violencias.

Cansado uno de cuadernos atestados de autobombo, lugares comunes y francotiradores, el de Enrique García-Máiquez es remanso de calidad y gentileza. Por eso es un placer su Un largo etcétera, de cuya calidad dan prueba los siguientes haikus, seguidillas o soleás: el primer poema da sentido al dolor; el segundo le da una vuelta de tuerca esperanzadora a un tópico pesimista; el tercero descubre la felicidad del yo en otro sitio; el cuarto me gusta por la belleza con que presenta el propio arrepentimiento; el quinto, por la sabia reflexión poética que se esconde tras un chiste; y la sexta, porque ¿qué mejor manera de cantar a la infancia que ser un poeta adulto haciendo un ruego a un personaje del mundo infantil?

Vienen bien unas penitas
de cuando en cuando. Que no
nos empalague la vida.

Sí... Ya... La vida es un soplo.
Pero un soplo que no apaga
esta llamita en nosotros.

Según parece,
yo, visto desde fuera, soy feliz.
Se tratará, por tanto,
de salir yo de mí.

Misa de mártires.
Y dudé si salir
porque llovía...

Estoy tan lírico
que con la media luna
tengo de sobra.

Tú, ratón Pérez,
llévate así su infancia,
poquito a poco.

Y un largo etcétera.

lunes, 10 de abril de 2017

Bailar un poema

Mi amigo y poeta Juan Andivia me ha dicho que en un teatro de Huelva una compañía va a cantar y danzar sus poemas. Y me ha parecido algo magnífico.

¿No es el colmo de la felicidad para un poeta que pongan música a un poema suyo, devolverlo a la música de donde nace? Si cantar un poema es hacer dos veces poesía, porque convierte el sonido en poesía, ¿cuántas veces hace poesía quien la baila, que no se conforma con poetizar el sonido, sino que además convierte en poesía su propio cuerpo?

Si ya sería maravilloso que musicasen un poema mío, ¡el alegrón que me darían si además me lo bailaran! Ni ojo vio ni oído oyó la fiesta interior, pirotécnica y archimuscántica que, si tal cosa ocurriese, mis potencias organizarían con mis sentidos internos y externos: mi aura se vería desde el monte Olimpo de nuestro hermano Marte.

Afortunado el poeta que, como Juan Andivia, reciba en vida tal galardón. Otros esperamos alcanzarlo después de muertos si es que en el Cielo se prestan para ello las bailarinas de Gades, las hijas de la reina de Saba y, por supuesto, los hoplitas danzantes de Esparta.

sábado, 8 de abril de 2017

El poema de la semana

He aquí este poema para que nos sintamos con él menos solos todos los que seguimos sin entender cómo nos abruma hoy la oscuridad a pesar de haber conocido ayer la gloria de la luz y de la dicha.

Si eras tendida en lo oscuro
Si eras tendida, en lo oscuro, esa hebra de sol viejo
que en el territorio extenso de las noches, une
el raro porvenir y la infancia allí agazapada.

Si detenías tú las lluvias y era un vaho secreto
aquella cama en la que fuimos una sola sangre.

Si, a ciegas, una vez, tenté tu corazón de bruma
y fui, a tu lado, el alba y la luna y la sombra mansa.
Si en tu arisca cabellera durmió mi corazón de hombre.

Quién esparce, hoy, aquí, en mi cuarto, el aroma
de la muerte.

La soledad del aguacero, Rafael Adolfo Téllez

lunes, 3 de abril de 2017

Llegó, llegó la golondrina

Aún recuerdo con horror al padre de un amigo mío en mi pueblo destrozando a pedradas un nido de vencejos que había anidado en el alero de su casa. ¡Lo que yo lloré! Todavía me apenan sus polluelos caídos al suelo y la delicada arquitectura del nido destrozada, mientras él celebraba a risotadas su puntería.

Yo había heredado de mi familia el cariño por las golondrinas . En la casa solariega de mi madre anidaban y sé que mi abuelo alguna vez les reparó el nido para que pudieran anidar el año próximo. Era tradición decir que en tierra de moros las mataban, pero que Dios las amaba porque le habían quitado a Cristo las espinas. Por ser monógamas, insecticidas naturales, bonitas y elegantes y traer en sus alas negras la primavera, bendecir la casa en que anidan, por todo eso, las protegemos y agradecemos.

Ellas y la poesía se llevan muy bien. No sería mala idea hacer una antología de poemas dedicadas a los pájaros.

Ya los antiguos griegos las celebraban:

ἦλθ᾽ ἦλθε χελιδών καλὰς ὥρας ἄγουσα, καλοὺς ἐνιαυτούς, ἐπὶ γαστέρα λευκά, ἐπὶ νῶτα μέλαινα ...

"Llegó, llegó la golondrina, trayendo las buenas estaciones, los buenos años, de blanco vientre, de negra espalda…"

Recuerdo que, hace ya varios lustros, me enamoré de una pelirroja que musicó este poema griego en la facultad de Filología Clásica de Málaga. Lo cantó respetando las cantidades de las vocales y el ritmo del verso. A las golondrinas y a mí nos encantó.

Con ellas nos bendice la primavera.

Bendigámoslas nosotros a ellas.

sábado, 1 de abril de 2017

El poema de la semana

¿Cómo no celebrar la primavera con un poco de Eros? Gracias a él no somos individuos autosuficientes y autocomplacientes, sino personas capaces de amar y dignas de ser amadas.

¡Qué aburrida es la mismidad y qué interesante uno mismo en la otredad!

REQUIEBRO
Me disperso en tu cuerpo cada día.
Contigo me completo. Mariposa
De fuego me acaricia y se desposa
Con la fuente total de la alegría.

Amar es bendecir. La lejanía
Se acerca hasta tus ojos temblorosa
Viene –catarata poderosa-
Mezclando el barro con la fantasía.

Tú sacas de la sombra lo escondido,
Alzas el corazón, ayer dormido,
Y lanzas mil libélulas al viento.

Y busco cada día tu destello,
Y se me enreda el alma en tu cabello
Y se me vuelve tuyo el pensamiento.

Juan Lorenzo Collado Gómez ((Huellas)

viernes, 31 de marzo de 2017

Tu sangre en mis venas

La editorial Renacimiento, con edición de Enrique García-Máíquez, ha sacado a la luz esta antología de poemas en torno a la figura del padre.

Tengo el honor y el orgullo de figurar, entre poetas que admiro, con dos poemas míos que me ha inspirado mi padre allí donde esté.

Papá, va por ti.

miércoles, 29 de marzo de 2017

Rezo del Ángelus en el campo

Debo a Felipe Barandiarán el conocimiento de este estupendo cuadro. Siempre me han sobrecogido los hombres fuertes que muestran pleitesía a lo sagrado, como este labrador, que se quita el sombrero para rezar a la Señora. Es una caballerosidad cristiana que parece contagiar incluso a los bueyes.

El cuadro está en el Museo de Bellas Artes de Álava, y es de Ignacio Díaz Olano.

domingo, 26 de marzo de 2017

Poema de la semana

La soleá es una estrofa sencilla y contundente. Las de hoy son también un poco amargas, pero buenas.

-Será otro día mañana
si no me quito de en medio
y si a mí me da la gana.

-Aunque esté lejos del puerto
veré a los barcos venir,
que al mar lo llevo por dentro.

-Empieza a darme lo mismo
que la muerte me separe
o que me junte conmigo.

-Averigua quién te dio
esas ganas de morirte.
Ha tenido que ser Dios.

Ha tenido que ser Dios
un día que estaba triste.
No tiene otra explicación.

Manuel Alcántara

viernes, 24 de marzo de 2017

"Las chicas no tienen pilila...y nunca la tendrán", de Los Inhumanos

La canción no vale la pena, pero lo que sí vale la pena señalar es que su mensaje, que en su tiempo parecía en la onda de lo rompedor y lo guay, hoy sería tachada de tránsfobo, carca e intolerante. Desde luego, el futuro de los acontecimientos humanos es impredecible. ¿Quién iba a decirnos que el estribillo de esta canción iba a ser prohibido unos años después, aunque dice una verdad tan vulgar como innegable?

La canción aquí.

Oigo el otro día en un bar la siguiente conversación entre dos varones:

-Esta noche voy al club, a ver si ligo.
-Que no te engañen: si alguna accede increíblemente a irse contigo al apartamento, pregúntale antes si es una mujer con pene o con vulva.

Y la gente del bar se echó a reír.

Pues eso, amigos, a reír. Contra censura, risa.

domingo, 19 de marzo de 2017

A mi padre, Miguel Cotta Rebollo, en su día

Nunca daré bastantes gracias por el hecho de que el varón que, junto con mi madre, ha sido causa de mi existencia no se limitase a algo tan grande y maravilloso como darme la existencia, sino que además me haya acompañado durante ella hasta que el cielo nos lo arrebató y me haya querido tanto y llevado a hombros e inspirado y hablado de padre a hijo y luego de hombre a hombre y me haya besado la frente y llorado y reído conmigo.

Mi padre me comprendía mejor que yo a mí mismo y me sigue comprendiendo. Y no puedo evitar seguir acudiendo a él para pedirle guía y consejo.

Recuerdo con horror un pecado mío que aún me abre las carnes. Me enfrenté a él con una tremenda discusión, en su propia casa, y me creía tan cargado de razón, que lo humillé. Él me intentó explicar, con argumentos luminosos, que no eran tan simples las cosas, que lo que para unos valía, para otros no, que… Pero yo, obcecado, arrojaba anatemas sin dejarlo terminar. Sólo me faltaba girar el cuello como la niña de El Exorcista. Ay, mi padre tendría que haberme cruzado la cara a bofetadas. Pero no; se fue a su cuarto dando un portazo y, al día siguiente, me dio un beso en la frente y un abrazo que me desarmó.

Resolvía los problemas con amor, sonrisas y determinación. Y esa mezcla tan suya de libertad individual, humor, reverencia ante Dios y amor al bien y la belleza ha sido su legado.

Lo último que poco antes de morir nos dijo fue un chascarrillo que hizo reír al médico y a todos nosotros en medio de las lágrimas.

En mis momentos oscuros, cierro los ojos y reclino en su pecho la cabeza. Aún lo recuerdo con sus imperecederos rizos negros, que no heredé, y su sonrisa iluminándole el rostro, mirándome atento para contarme las cosas importantes y bellas de la vida. Desde entonces, el amor, las estrellas, los ríos huelen a su mano y sus palabras de poeta.

Gracias, padre, por mi madre, mis hermanos y la Tierra y el cielo que con la vida me has regalado. Aún sigo recibiendo aquí abajo tu bendición.

sábado, 18 de marzo de 2017

El poema de la semana

Qué sea la flor azul es un misterio. ¿Dicha, sentido, amor, esperanza? ¿Lo que mata a la muerte? ¿Volver a pasear con Dios en el Edén? ¿Lo que descorre el velo del misterio? Pero es algo que solo puede revelar un moribundo, porque es muy difícil de encontrar en esta vida y él ya tiene un pie puesto en la otra.

LA FLOR AZUL
Dónde la flor azul. En qué ladera
de la montaña crece o en qué calle
de la ciudad asoma su corola,
hecha de mar y cielo despejado
y pétalos de eterna juventud.
Dónde la flor azul que habla el idioma
primeval del amor y del coraje
y que cura la alergia de estar vivo.
“Al país de la rama de oro, donde el pájaro
azul se posa, más allá de fuertes
y fronteras, habrás de ir a buscarla”,
dijo mi madre antes de morir.
Luis Alberto de Cuenca

martes, 14 de marzo de 2017

Un ateo en la Scala Santa

Milagro del amor y del respeto, del aprecio de una tradición venerable, he aquí que mi amigo Felipe, que no siente necesidad alguna de trascendencia ni religiosidad, ni ve necesario postular un ser primero, superior y originario para explicar el cosmos; que considera este como el hecho primario y originario más allá del cual es absurdo remontarse y del cual somos una imprevista consecuencia, un hecho accidental, contingente y casual; que opina que la inteligencia no alcanza la verdad sino una ilusión de conocimiento que, mira por dónde, funciona y que solo es cuantitativamente distinto del que tiene, por ejemplo, un lince; que considera al hombre un ser totalmente material y mortal; que no cree que Jesús fuera la encarnación del Logos, sino solo un hombre; en fin, Felipe, que ha ido a Roma de visita con su familia, ha subido de rodillas la Santa Scala, aquella que se trajo santa Elena, madre de Constantino, de Jerusalén, y que todos los peregrinos suben de rodillas y rezando porque, según la tradición, son las escaleras del pretorio que subió Jesús al ser juzgado por Poncio Pilato.

Le he preguntado si rezaba un padrenuestro en cada peldaño y me ha dicho que no, sino que solo quería participar de esa tradición con su mujer y sus hijos, que sí que creen, y con los demás peregrinos.

Desde luego, si existe el Cielo y me muero antes que Felipe y resulta que soy digno de estar con Homero, Dante, Tolkien, san Juan de la Cruz y todos los grandes y buenos, y veo que algún ángel un poco tiquismiquis se opone con mil razones a que mi amigo Felipe suba al cielo alegando su perfecto ateísmo, yo gritaré en pleno juicio: "¡Protesto! Felipe ya ha subido al cielo en la tierra, en concreto en Roma". Y mostraré como prueba el vídeo celeste de su ascenso. Y entonces el Cielo entero le abrirá las puertas.

Lo garantizo.

domingo, 12 de marzo de 2017

Poema de la semana

No se puede decir de modo más claro ni más bonito. Feliz domingo.

EL JOVEN FRAILE

Y pensar que nadie desabrochará mi camisa
con manos de paloma,
ni hará caracoles en el vello de mi pecho
porque ya tengo un amor que es Todo y Nada…

Y saber que soy un guerrero
que reza como un almendro.

(Antonio Praena)

lunes, 6 de marzo de 2017

Sueño y autoconocimiento

He soñado que estaba a mi cargo un recién nacido que no sé si era mío, de unos huéspedes o de unos desconocidos. No estaba claro su origen, pero sí cuánto lo quería yo. Y he aquí que se lo llevaron unos secuestradores (o unos alenígenas o unos ectoplasmas oníricos materializados o unos espíritus inmundos, que eso estaba menos claro aún) a un mundo paralelo e impenetrable que, de pronto, estaba en mi misma habitación. Al principio me separaba de él un cristal esmerilado a través del cual yo advertía allí al fondo un movimiento vertiginoso, pero salí un momento de la habitación y, al volver, ya no estaba el cristal, sino solo mi habitación, como antes.

La única prueba que quedaba de que yo tenía hasta hace poco un niño en brazos era la sensación de haberlo tenido. Llegué a plantearme en el sueño si había sido todo un sueño y me indignaba pensar que todos pondrían en duda mi relato, porque mi única prueba era mi propia sensación de que me había sido arrebatado algo maravilloso. Al final, ni siquiera recordaba qué es lo que me había sido arrebatado.

Me he despertado con angustia y sintiéndome aún despojado.

Esa sensación me es familiar. La conozco desde que tengo memoria. Este sueño no ha hecho sino presentármela de modo narrativo e impactante, pero estoy seguro de que es la misma que les quedó a Adán y Eva cuando fueron arrojados del Edén por aquella espada de fuego.

Soy todo lo feliz que se puede ser en esta vida, pero me falta esa cosa que no sé qué es. Y el sueño me ha hecho ver que tal vez escribo poesía para encontrar el camino al paraíso y volver a tener en mis brazos la maravilla.

sábado, 4 de marzo de 2017

El poema de la semana

Contra mi costumbre, envío hoy un poema triste, muy triste, pero lo pongo aquí por dos razones. La primera es que me parece buenísimo y representativo de la desesperanza que a todos nos ha oscurecido alguna vez. La segunda es que es de mi hermano Daniel.

En esa pared blanca y encalada
veo un puntito negro, sólo un punto,
y pienso y pienso tanto en ese punto
que sólo veo punto en la fachada.

Veja y maltrata, pero ¡cuánto agrada
dejarse fornicar por ese punto,
que viole a mis cerebros hasta el punto
de serlo todo él; lo demás, nada!

Un punto, un punto negro desintegra
y vampiriza mi alegría. Un punto
que vuelve una pared de blanca en negra.

Un punto que es un universo.
Un punto se está comiendo mi existencia.
Un punto va a devorar a Dios, un punto, un punto.

(Daniel Cotta, de Alma inmortalmente enferma)

jueves, 2 de marzo de 2017

Los niños tienen pene y el rey está desnudo

Decir que los niños tienen pene y las niñas vulva, algo tan vulgar, sencillo y evidente, es tachado de transfóbico en España y se ha convertido en delito de opinión, en "crimental", como dice George Orwell en 1984. Por lo visto, la tolerancia no consiste en tolerar las opiniones contrarias, sino en que estas no existan.

Dado que la opinión políticamente correcta y sostenida por el sistema político y educativo es la ideología de género, según la cual no se nace niño o niña, sino que se hace uno niño o niña, la opinión del autobús de Madrid diciendo que los niños tienen pene y las niñas vulva, es una ofensa inadmisible. Así que, sin resolución judicial alguna, el autobús ha sido detenido por la policía (ahí en una foto de El País).

Comienza a ser delito decir lo evidente y cierto: que el rey está desnudo, es decir, que a nivel celular, fisiológico, de percepción y de comportamiento (y, en el homo sapiens, incluso en la manera de gestionar los sentimientos y los pensamientos), machos y hembras son afortunada y complementariamente distintos. Los machos pueden ser padres y las hembras pueden ser madres y no hay cultura donde no haya una división de tareas según los sexos: el contenido de tales tareas varía de una cultura a otra, pero la división existe.

Los raros casos con disforia de género (la discordancia entre el sexo biológico y la identidad sexual), son la excepción que confirma una regla y tal regla consiste en que los que nacen con un sexo son por el dimorfismo sexual de la naturaleza distintos de los que nacen con el otro.

Si alguien, en la edad adulta, desea cambiarse de sexo, puede hacer lo que le venga en gana, que para eso hay libertad, pero lo que no puede pretender es cambiar la sociedad y la educación y la concepción antropológica de manera que su disforia de género pase de ser excepción a ser norma.

Según el Colegio Americano de Pediatras (aquí un enlace), tales casos se resuelven casi todos en la adolescencia a favor del sexo biológico. Entonces, ¿para qué confundir a los niños diciéndoles que no tienen por qué aceptar su sexo biológico y condenándolos así a estar siempre en disconformidad con su propia naturaleza?

Si todas las personas que piensan que los niños tienen pene y las niñas vulva fuesen detenidos, el mundo se quedaría prácticamente despoblado. Entonces, ¿por qué no sale más gente defendiendo lo evidente frente a quienes, con argumentos ideológicos sin base científica, quieren callar la boca de los que disienten?

Con el silencio de muchas personalidades e instituciones, que tienen miedo a perder prestigio, prebendas ,subvenciones o a recibir ataques de los furibundos ideólogos de género en la prensa y en los medios sociales, y con el ataque directo de políticos como Iglesias, Cifuentes, Colau, Pedro Sánchez, etc, algo huele a podrido en España, donde lo políticamente correcto está destruyendo nuestro sentido del humor, nuestra libertad de criterio, nuestro ancestral individualismo anarcoide antitotalitario.

Desde luego, el "no he de callar, por más que con el dedo..." es ya letra muerta.

lunes, 27 de febrero de 2017

Si hubiera un país...

Si hubiera un país de clima templado, sin los rigores de las heladas, los monzones y los sirocos, con tantas montañas como ríos y playas, con islas bienaventuradas y un volcán, qué afortunados deberían ser sus habitantes.

Si existiera un país que en sus bosques y villas hubiera acogido a extranjeros del norte y del sur y hubiese asimilado sus artes y costumbres y no solo hubiera hecho suya a Roma la invasora sino que además la hubiera derramado con frailes intrépidos por los cuatro puntos cardinales, qué herencia feliz habrían legado al mundo.

Si existiera un país, y esto sería ya el colmo de la maravilla, con una riqueza incontable de tradiciones, una literatura dos veces milenaria, unas ciudades monumentales, una gente acogedora, unos pintores mundialmente conocidos, una música popular y culta tan variada como bella, unos vinos portentosos y una gastronomía única, sana y colorida, ¿quién no querría irse a vivir allí?

Si hubiera un país cuya lengua hablaran quinientos millones de personas que lo llamaran Madre Patria y donde existieran palabras como amapola, compañero, ruiseñor, Peñíscola, cariño o lubricán, ¿quién no querría que le hablasen de amor o amistad con esas palabras alegres como soles?

Y si existiera un país con una Sagrada Familia y una Giralda y unos pináculos góticos apuntando al infinito y un botafumeiro perfumando el mundo y unos libros con personajes eternos como Amadís, don Juan, la Celestina o don Quijote, qué orgullosos deberían estar sus habitantes y qué natural y bien fundado debería ser allí el patriotismo. ¿Existirá algún país así? ¿Habrá en el mundo alguna nación que haya bendecido con tantos bienes a sus hijos?

sábado, 25 de febrero de 2017

Poema de la semana

El amor se desborda ante el abandono, la indefensión y el misterio del hijo durmiente.

La pequeña durmiente
No es que el mundo esté bien: es que no existe.
No hay nada alrededor:
sólo tu sueño.
Nada tiene más ley que tu abandono,
tu suave abjuración,
la dulce apostasía que te ausenta.
No hemos fundado el mundo: nunca cambia.
Pero este cuadro es nuevo
-padre e hija-,
porque sólo el amor es diferente,
sin por ello dejar de ser lo mismo.
El anchuroso mundo, que no importa,
gravita en torno a ti: lo has imantado,
y vive irreprochable hacia tu brújula.
Lo innúmero se rinde a tu unidad sencilla.
Durmiente flor desnuda en mis palabras,
adormidera de los desencantos,
prístina amapola pálida.

De Carlos Marzal

lunes, 20 de febrero de 2017

Pelícana púgil

Tenía yo veinte abriles y peinaba aún rizos en mi cabeza cuando quise componer un poema de amor muy original. Yo quería decir a una mujer que era luchadora a la vez que abnegada, así que tuve la ocurrencia de llamarla en mi poema "pelícana púgil": pelícana, por lo de abnegada, porque en la tradición los pelícanos dan su sangre a sus crías, y lo de púgil, por lo de luchadora.

Cuando la persona en cuestión leyó lo de pelícana púgil, me dijo en un tono que era, por increíble que parezca, de agradecimiento y recriminación: "Pero, Jesús, ¿qué te he hecho para que me llames pelícana púgil?".

Y entonces se me cayeron de los ojos unas como escamas y me di cuenta de que todo lo que uno escribe lo tiene que leer antes otra persona que sea amiga tuya, pero que ame más aún a la poesía.

Pues, eso, ¡tened amigos que os lean cuando aún hay tiempo!

sábado, 18 de febrero de 2017

Poema de la semana

Desde que se pronunció ese sublime “Sed como niños”, el niño dejó de ser solo el inicio de un proceso y pasó a ser un modelo.

Leyendo este poema entiende uno por qué.

Feliz semana a todos

Curriculum vitae
Fui feliz en los bancos de la escuela,
feliz en el cuartel y en el colegio,
y en aquellos veranos sin más agua
que la del pozo aquel del patio.
Si tuve sinsabores
supe olvidarlos al debido tiempo.
Viajé en un tren colgante sobre un río
entre bosques y fábricas,
y en vaporcitos entre los canales
de ciudades marinas.
Fue azul mi vida como el mar,
blanca como la nieve,
y tuve, cómo no, mis horas bajas,
de ésas que abren en el alma el surco,
difícil de llenar, de los remordimientos.

Aquilino Duque

miércoles, 15 de febrero de 2017

El poema de la semana

El hombre es más grande que el océano porque lo puede abarcar en una sola palabra y una sola lágrima.

FUENTE
Hoy me salgo del río más profundo. Monstruo soy de ese lago
donde me espera un cisne.
Tengo la paz ahogada en una gota de agua,
en esa sal que sale, a veces, de los ojos. En la sangre
que corre y se desborda y hace fuente a los árboles.
Tengo una inmensidad que tiembla en los océanos,
siendo sólo una fuente pequeña como un ojo.

(de Rebelión de un recién nacido, de Juan Antonio Villacañas)

Feliz miércoles a todos.

lunes, 13 de febrero de 2017

Niños de Papúa cantando a Dios y un negro albino

¿No es conmovedor lo natural de la reverencia que muestran estos cantantes ante lo sagrado? Me gusta la manera que tienen de aplaudir, con las manos un poco más abajo que nosotros y alternando una palma con la otra; me gusta que la letra no vaya de lo que Jesús (Keliso) puede hacer por mí, sino lo que yo puedo hacer por él. Eso es algo más grande incluso que la religión. Y lo que más me gusta es ese fervor sin afectación ni hipocresía, esa naturalidad de lo religioso que en Europa se está perdiendo. ¿En qué lugar de Europa se va a poner a cantar a Dios todo un poblado? En Europa, desde luego, estamos mucho más atrasados que en este rincón de África o Papúa Nueva Guinea (que no lo sé muy bien).

Se da además la curiosidad de que uno de los guitarristas es un negro albino. Aunque he leído mil veces acerca de la mala suerte de nacer albino en África, este parece feliz e importante allí. ¡Con qué entusiasmo él, como los otros guitarristas, se esfuerzan por guiar el canto!

No sé qué tiene este vídeo que me llena de paz y quiero compartirlo con vosotros.


lunes, 6 de febrero de 2017

El día de la concepción

El día más importante de mi vida no fue el de mi nacimiento, sino el de mi concepción, porque con mi nacimiento me dieron a luz y con la concepción a la existencia. Ese día dos personas que me querían incondicionalmente, como yo saliese, y que me hicieron con amor, placer y libertad, que es como los hijos se deben hacer, me salvaron de la nada, que es mucho peor que la muerte. Hicieron mi cuerpo para la eternidad y obligaron a todo un Dios a infundirle un alma inmortal y asignarle un ángel.

Yo empecé a ser yo no cuando nací, sino el día en que un microscópico e intrépido nadador logró alcanzar la isla dorada, porque entonces fue cuando fui dotado de todo lo que yo iba a ser y necesitar hasta el día de mi muerte. El día de mi concepción está escrito con oro en el Libro y ya nunca será borrado.

Propongo, amigos míos, que se celebre a partir de ahora el día de la concepción más que el del nacimiento. Como no todos conocemos ese día (y está bien que así sea), será mejor que celebremos el mes de la concepción. Durante ese mes, los que nos quieren nos harán nuestras comidas favoritas, nos regalarán libros, ropa, quizá un viaje o un masaje, un libro de poesía... Durante ese mes, las estrellas nos serán favorables.

lunes, 30 de enero de 2017

Revelación dentro de un sueño

Hace unos diez años tuve un sueño muy vívido, límpido, lúcido y, en general, muy esdrújulo e inténsulo él. Soñé que me bañaba en una corriente de agua subterránea fresca y transparente donde pasaron ciertas cosas que es mejor no contar. El caso es que tengo todavía muy grabadas en mi memoria las formas y espacios de aquel lugar.

Y cuál fue mi sorpresa cuando hace un par de meses, visitando la Gruta de las Maravillas de Aracena, después de la llamada Cristalería de Dios, encontré el lugar exacto de ella donde transcurrió mi sueño.

Lo más curioso es que yo había visitado esas cuevas hacía más de treinta años y solo me acordaba, vaya usted a saber por qué, de la llamada Sala de los Desnudos. De lo demás no lograba acordarme en absoluto. Pero se ve que las grutas estaban escondidas en mi mente esperando, para regalarme un sueño delicioso y detallado.

La mente humana es misteriosa y grande como el mundo. ¡La de sitios y cosas y personas y maravillas y horrores y pasadizos y secretos que tendré seguramente dentro de esta mollera calva! ¡Lo que me gustaría realizar por ahí un viaje, a ser posible, sin psicotrópicos!

sábado, 28 de enero de 2017

El poema de la semana

Lo más contrario de la muerte es Eros, que es la celebración de la vida.

Ardimos en el bosque
(…)
Joven el rostro era,
sus labios sonreían,
y el retenido fuego de su cuerpo
era quemada luz.
Entramos en el mar, rompíamos
el cielo con la frente,
y envueltos en las aguas contemplamos
las orillas del bosque,
su extensa fosquedad.
Miré, tendidos en la playa, el rostro:
contemplaba las nubes;
y el retenido fuego de su cuerpo
era un sombrío resplandor.
Penetramos el bosque, y en las lindes
detuvimos los pasos;
perdido, tras los troncos, miramos cómo el mar
oscurecía.
Tenía triste el rostro,
y antes que para siempre envejeciera
puse mis labios en los suyos.

Francisco Brines

martes, 24 de enero de 2017

Una cura de humildad y moral sexual


Le espeté una vez a un cura que la iglesia estaba obsesionada con el sexo y la moral sexual y él me respondió algo así como esto:

-El que está obsesionado eres tú y la sociedad de hoy. La Iglesia no ha cambiado su postura al respecto; es ahora cuando gente como tú, rechazando como represión cualquier manera de humanizar y dignificar un impulso tan fuerte como el sexual, se revuelve contra lo que siempre ha dicho y dirá la Iglesia.

No le di la razón, por una cuestión de orgullo, pero, nada más oírlo, supe que la tenía él, no yo.

Hoy es dogma la creencia de que en el sexo vale todo entre personas adultas y libres, siempre que no haya coacción. Por ello, es un antidogma, un tabú, la afirmación católica de que el sexo no debe desligarse del placer, el amor, el compromiso y la fecundidad.

Si quieres probar lo tabú que es, sugiérelo en una reunión y se te lanzarán al cuello treinta, como yo me lancé al del cura.


jueves, 19 de enero de 2017

Silencio, de Scorsese

La vi el sábado y no dejo de rememorar escenas de una película cuya banda musical es el silencio de Dios en la tierra aislada, negra, húmeda y neblinosa de Japón. Es un silencio por el que pasó el mismísimo Cristo en Getsemaní y a pesar del cual los protagonistas llevan la llama de lo sagrado siempre encendida en el corazón.

Yo había leído a mis veinte años la novela de Endo, en que se basa la película, y me marcó. Pero ahora, al ver la película, compruebo que hay novelas que no mueren dentro de uno.

Esta película es un canto al concepto de dignidad individual traído por los misioneros al mundo oriental, donde el individuo no es un hijo de Dios, sino una ilusión pasajera que volverá a fundirse en un todo incomprensible.

La simpatía y la humanidad de los jesuitas y de los mártires es incompatible con la incomprensión, la indiferencia y el sentido del deber de los funcionarios imperiales encargados de erradicarlos de modo eficaz y venenoso.

La caracterización de los personajes, la ambientación, los diálogos; la impresión que produce la naturaleza con sus paisajes bellos e inocentes en contraste con la crueldad de los martirios, que el director no oculta ni exagera; el miedo que se respira en cada minuto y en cada esquina; el choque de dos culturas hechas y derechas; la conciencia como reducto inconquistable de libertad, esperanza y belleza donde solos están Dios y el individuo; lo religioso como lo más íntimo y libre en el hombre... todo eso hace de esta película de Scorsese una maravilla que recomiendo encarecidamente a quienes amen la historia, el cine, Japón y la belleza de los inocentes.

lunes, 16 de enero de 2017

Preadolescencia

Aquí poso en un campamento en la Sierra de Cazorla.  No sé si tengo doce o trece años. Aún no tenía ni bozo.

Fue por aquellos días cuando, jugando en medio de los pinos al poliladro, me camuflé tan sumamente bien, que una cierva que estaba a mi vera no se percató de mí, y la toqué pensando que era el tronco de un árbol, y era cálida y suave y bonita y huyó asustada de mí, pero a mí me dejó para siempre herido de poesía.

Nunca le estaré lo bastante agradecido.

Por cierto, me han dicho que cada cinco años se renuevan todos nuestros átomos. Si no soy mis átomos, ¿qué soy? ¿La organización de mi materia? ¿Soy su epifenómeno? Y si lo soy, ¿cómo es que me considero más importante y real que mi materia? ¿Cómo va a ser este que os habla una mera consecuencia de una organización material, una percepción psíquica en sus neuronas, en vez de una realidad inmaterial, el fundador del individuo, el protagonista real de todos esos átomos tan complejamente organizados?

En fin, no os caliento la cabeza, no sea que, como yo, os quedéis calvos.

sábado, 14 de enero de 2017

El poema de la semana

La poesía es la única forma elegante de desnudarse. En esta, el poeta se desnuda y muestra el círculo de placer, dolor y desconcierto en que consiste su vida. El final es brillante y revelador de lo que es ser humano.

Feliz año y que la poesía os abrigue en estos días de frío.

La pregunta
En la noche avanzada y repetida,
mientras vuelvo bebido y solitario
de la fiesta del mundo, con los ojos muy tristes
de belleza fugaz, me hago esa pregunta.
Y también en la noche afortunada,
cuando el azar dispone un cuerpo hermoso
para adornar mi vida, esa misma pregunta
me inquieta y me seduce como un viejo veneno.
Y a mitad de una farra, cuando el hombre
reflexiona un instante en los lavabos
de cualquier antro infame al que le obligan
los tributos nocturnos y unas piernas de diosa.
Pero también en casa, en las noches sin juerga,
en las noches que observo desde esta ventana,
compartiendo la sombra
con el cuerpo entrañable que acompaña mis días,
desde esta ventana, en este mismo cuarto
donde ahora estoy solo y me pregunto
durante cuánto tiempo cumpliré mi condena
de buscar en los cuerpos y en la noche
todo eso que sé
que no esconden la noche ni los cuerpos.

(Vicente Gallego)

lunes, 9 de enero de 2017

Yo de cinco en cinco años

Quería inaugurar el año cambiando la foto de mi cuaderno de bitácora, que es de hace más de diez años, pero no tengo ni idea de cómo hacerlo. Así que he decidido mostrarme a mí mismo de cinco en cinco años de mi vida.

Al ver mis fotos antiguas, lo increíble no es lo mucho que he cambiado por fuera, sino lo poco que he cambiado por dentro. Pero más increíble me parece lo breve y bello que ha sido todo. 

Me siento como una efímera chispa que, escapando de la nada que le antecede, brilla un instante con todo el fogonazo del que le hizo capaz el amor con que la engendraron, para alumbrar el oscuro cosmos que luego va a devorarlo, y en ese breve instante ¡cuánto amor, cuánto deseo, cuánta poesía, cuánta incertidumbre y cuántas estrellas guiándome desde el cielo!

En esta primera entrega creo que tengo cuatro o cinco años. En una estoy serio y en otra me río, porque estoy rodeado de hermanos y en brazos de mi padre.