jueves, 25 de mayo de 2017

Pedagogía de urgencia

Recuerdo que de niño estaba en la playa y vi flotando en el agua lo que a mí me pareció un globo bastante feo y alargado y de boca grande, pero, al fin y al cabo, un globo con el que jugar. Cuando lo cogí del agua y lo fui a inflar, mi padre me ordenó que lo tirara. Ante mi estupor por esa orden, mi padre me dijo algo que me quitó para siempre las ganas de globos flotantes en el agua y que a ver si logro poner en pie:

-Eso es una tripa que se ponen los viejos en el pito para hacer pipí.

Papá, nunca te daré bastante las gracias por aquella estupenda e improvisada explicación que mis siete u ocho años entendieron a la perfección.

Desde entonces me han parecido feísimos los condones.

2 comentarios:

Dyhego dijo...

Don Epifanio:
¡tiene usted mucha razón!
Es un objeto bastante feo, sobre todo después de usado, o si lo ves por el suelo.
Pero es muy útil y necesario.
El cepillo de dientes también es feo. Y los peines. Y los cortaúñas. Etc.
25 neutonios profilácticos.

Jesús Cotta Lobato dijo...

Tiene usted razón, pero de todas las cosas que usted ha nombrado la más fea con diferencia, a mi parecer, es el globo.
25 neutonios preservados