Estoy encantado con estos niños que cantan en quechua villancicos con una gracia y un gracejo que me emocionan. Son un testimonio viviente de la síntesis que supuso el Imperio Español entre las culturas amerindias y la Cristiandad que España les transmitió. Aún no sé yo de pueblos nativos en Norteamérica que hubiesen aprendido villancicos de los ingleses. Estos niños son la España de ultramar, más España incluso que la nuestra. Que ellos os alegren el corazón. Ahí va "Asnuchaypi"
2 comentarios:
Don Epifanio:
muchas gracias por darnos a conocer este villancico tan alegre y movido.
Salu2 quechuas.
Don Dyhego, para mí es un placer inmenso compartirlo con usted. 25 neutonios andinos
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