miércoles, 8 de julio de 2009
El fauno y las ninfas
Cada veintiocho días, con la luna creciente, las ninfas se visten con una túnica azafranada y yo deposito al pie de sus lechos verdes un blanco corderillo y si ellas aceptan el obsequio, sé que me dan venia para abordarlas a lo largo del día en cualquier lugar.
Entonces se despiertan contentas y saben que mientras se cepillan juntas a la orilla del río o retozan en el agua o llenan sus cántaras en la fuente de los pájaros o comen dátiles bajo un árbol, el fauno cargará a una de ellas en los hombros mientras ella inútilmente le golpea con sus blancos nudillos la peluda espalda y esos golpes enardecen a este violador concertado, que en el rincón más espeso del bosque les levantará la túnica y les llenará de simiente las entrañas.
Y consumado el estupro, la ninfa se finge dormida y él la toma en brazos y la devuelve a su lecho verde, le besa la frente y se va por otra.
A mí me gustaría un amor más dulce, menos violento, menos raptador, no sé, por ejemplo, acariciarles el pelo bajo un álamo y leerles los versos que tengo escritos, pero es que las ninfas se aburren con eso.
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23 comentarios:
Nunca se aburren. Nos aburrimos nosotros al creer que se aburren.
El aburrimiento no existe ni en las ninfas ni en los poetas.
Me alegra volver a leerte. Eres tú, y es tu estilo.
Un abrazo.
En el fondo todos creemos que a las ninfas les gustan los motoristas.
Un placer leerte de nuevo
Por cierto tengo po aquí un libro que se llama "las virgenes prudentes", y te contaré.
Javier, qué bien que pongas juntos a las ninfas y a los poetas. ¡Qué bien lo vamos a pasar los dos con ellas!
Jesús, sí, quizá sea esa idea la que se esconde tras esa historia.
Estas ninfas...no tienen arreglo, Jesús.
Julio, qué le vamos a hacer. Habrá que seguir sacrificándose por ellas.
si cuando le dije a JSM que me parecías un fauno...
Me ha encantado.
Hala, un abrazo
Aurora
Aurora, vaya, con que parezco un fauno... Mmm, pues me gusta.
Me ha gustado mucho esta entrada, Jesús. Creo que si fuera ninfa me gustaría la marcha de los faunos, aunque de vez en cuando no vendrían mal unos segundos de ternura.
Un abrazo.
Lo bueno de los faunos, Mirna, es que se amoldan a los gustos de las ninfas. Un beso.
poniéndome hembrista de pelotas, quisiera reivindicar el derecho de las poetisas a tener ninfos negros con trapecios bovinos, dorsales acorazados, glúteos pneumáticos y gigantescos falos orográficos...
todo en ébano vivo...
(estoy pensando lo fea que es la palabra sapelli... abebay tampoco es para tirar cohetes... wengué no está mal... la decoración en general es algo ridícula desde el momento en que "viste" los armarios...)
a lo que iba, debe ser aburridísimo ser poetisa...
Eresmicruz, eso de ser hembrista de pelotas me ha dejado estupefacto. Y en ese sentido eres estupefaciente. Envidio esa capacidad de hacer juegos de palabras y dar la vuelta a la tortilla en sólo tres renglones. En esa reivindicación de poetisas y ninfos, te has olvidado de las faunas y de los poetisos y de los ninfisos y los faunisos y faunisas. Y, por supuesto, ¿no te has dado cuenta de que "Todo en ébano vivo" es un título de antología para cualquier cosa? Por favor, escribe algo y titúlalo así.
yo creo que todos los poetas son poetisos...
poetiso, sa. deberían ser los términos...
poeta rima con teta... pero...
jesús, tus palabras me ha henchido de coraje...
creo que lo voy a hacer... estoy decidido...
me llamarán racista desde el ministerio pero...
Todo en ébano vivo... ese será el título de mi próxima Memoria de Calidades...
Si es así, hazme llegar cuando acabes esa obra. Yo te apoyaré ante quien sea. Un título así lo merece.
con prólogo del escritor fauniso Jesús Cotta...
suena escandaloso... como a... el estreno de
Le Sacre du printemps en París...
(ésta la tenía preparada para la india papuchi que se fuma los More como una ametralladora...)
no sería el primer libro en el que la introducción es muchísimo más interesante que el cuerpo de la obra...
No ceo que las ninfas se aburran con tus versos.
Inténtalo de nuevo.
Ya verás.
Me ha encantado tu texto.
Saludos.
Eresmicruz, las introducciones son siempre interesantísimas.
Tecla, gracias. Todo sea por las ninfas.
Qué tiempos aquellos, desde que los faunos perdimos el pelo ya nada es igual
Un abrazo
Capitán, ¿te has dado cuenta de que esa simple pregunta tuya es un estupendo microrrelato? De repente uno descubre que los hombres somos faunos sin pelo, venidos a menos, un poco domesticados. Un abrazo, my captain.
Thanks a lot, my Master
Que un solo fauno sea "hipogrifo violento" y dulce amigo que se sepa todas las cantigas, es el sueño de alguna ninfa que conozco.
De todas formas, es muy tierno imaginarte intentando leerles los versos que tienes escritos. Aunque sea en la ficción literaria, puedo oírte;-)
Me gusta que vuelvas de vez en cuando.
Un abrazo.
Olga, también al fauno le gusta esa mezcla de hipogrifo y poeta, pero, sobre todo, le gustan las ninfas, por las que está dispuesto incluso a dejar su poesía en el olvido.
La ninfa Selima ,estaba en la arboleda , ella escucho al Fauno recitar sus versos ... y se convirtió en la Rosa de Fuego , en su interior guarda los versos más bellos del Fauno no quedará en el olvido ... ahora es parte del foat divino ...
Preciosa entrada ,ah por cierto la Rosa de Fuego vive en Canora .
Felices vacaciones Cotta san .
Rosna
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