lunes, 6 de junio de 2016

Gracias por sus hijos

El otro día, en la fiesta de graduación de segundo de bachillerato, descubrí que dos alumnos y una alumna a los que he dado clase en sucesivos años eran hermanos. No se parecían físicamente en nada, salvo en una cosa: eran educados, guapos y listos. Disfrutaron mucho revelándoseme como hermanos y, para redondear la cosa, llamaron a sus padres, que estaban allí en la fiesta, y que eran tan amables como ellos tres. Entonces les dije algo que me salió del corazón y que pienso repetir a partir de ahora para todos los padres con cuyos hijos haya yo disfrutado dando clase: -Gracias por sus hijos.

2 comentarios:

Dyhego dijo...

Don Epifanio:
da gusto encontrar alumnos y padres así.
¡Que cunda el ejemplo!
25 neutonios filiales.

Jesús Cotta Lobato dijo...

Usted es un padre de esos. 25 neutonios paternales