Si los romanos hubieran sido posmodernos, no habrían luchado contra los cartagineses, no habrían considerado las virtudes romanas de austeridad, patriotismo, fidelidad a las tradiciones y los dioses como superiores a las cartaginesas y cuando algún romano hubiese echado pestes de los dioses cartagineses, que devoraban niños vivos, se le habría tachado de etnocentrista, de patriotero, se le habría recordado algún crimen o abominación cometido por alguno de los dioses romanos y, entonces, como los cartagineses no serían tan posmodernos, sino que estarían muy orgullosos de ser quienes eran, de creer en sus dioses, habrían aprovechado para convencer con armas y elefantes a los romanos de cuán conveniente era que no creyeran en sus dioses, en sus tradiciones, en su patria y, por tanto, en la necesidad de defenderlos.
Pues eso
5 comentarios:
Ave, Cotta.
Pues menos mal que no fueron posmodernos.
¿Quiere eso decir que, a su vez, los bárbaros fueron más modernos que los romanos, y luego los musulmanes más modernos que los bárbaros? ¿Basta con tener más fe que la cultura de enfrente en los valores propios o triunfan porque son moralmente superiores? ¿Es cada civilización que se impone sobre otra moralmente superior, en una progresión de la humanidad hacia la excelencia? Cuesta creerlo y desde luego, la propia fe no lo garantiza si creo que sea en sí un valor. Nadie más convencido de la superioridad de sus propios valores que la actual cultura islamista pero en ese caso, prefiero ser posmoderna, el orgullo de los vencidos es no ser los vencedores.
¿Que romanos?, ¿los de la Monarquía?, ¿los de la República?, ¿los del Imperio?.
Leí este verano la biografía (?) sobre Cayo Mario que escribió Collen Mc Cullough. Fue un momento importante de la Historia de Roma, creo. Por primera vez se permitió a los no poseedores de tierras ser reclutados para legiones. Fue siete veces cónsul. En definitiva un tipo que antes de él Roma era de una cierta forma y después de él de otra.
Ayer le oí al Prof. Pérez Díaz que la caracteristica importante de los romanos era la "piedad". Después explicó este concepto, per lo hizo tan bien que no me atrevo a repetirlo.
Querida anónima: más que una alabanza de la modernidad, mi entrada es una crítica a la posmodernidad, que se niega a considerar objetivamente superiores valores como la igualdad esencial de los hombres y la democracia a valores como el nacionalismo o la discriminación sexual o racial. La cultura occidental es portadora de algunos valores como ésos que considero superiores y esos son los que hay que defender. Si en mi texto he dado la impresión de que es bueno el que gana porque está convencido de su excelencia, no era ésa mi intención: esa convicción es sólo legítima si esos valores son superiores, no si son sólo los míos. Un abrazo.
Querido lopera: me refiero a los romanos de la República, los que vencieron a los cartagineses. Un abrazo
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