martes, 29 de mayo de 2012

Mis alumnos de segundo de bachillerato

Hoy, después de que les repartieran las notas, he invitado a mis alumnos de segundo de bachillerato a unas cervezas, a un nestea y a varias cocacolas.

Estaban que no cabían en sí de gozo, no solo porque casi todos habían aprobado todo, sino porque el día era estupendo y el profe los invitaba.

Me hablaban de sus novias y de sus novios, de sus planes para el futuro, de sus aficiones y algunos de sus técnicas para copiar en los exámenes.

Lo que más me gusta de ellos es la nobleza que rezuman, el entusiasmo vital que le ponen a todo, la facilidad con que sonríen, los abrazos que me han dado cuando lo han aprobado todo.

Vale la pena haberles dedicado todo un curso.

Gracias les doy desde aquí por haber soportado mis rollos, mis malos chistes, mis malos días. Gracias por haber disfrutado con mis buenos chistes, mis mejores clases y mis mejores días.

Que Dios los bendiga y premie sus esfuerzos, su bondad y su simpatía.

Así sea.

20 comentarios:

Dyhego dijo...

Don Epifanio:
Sin duda tanto ellos como usted se lo han merecido.
¡Enhorabuena!
25 neutonios aproba2.

Rosna dijo...

Esta entrada me emocionó compartir un día con sus alumnos . Que felicidad para usted y para ellos .
Que hermosa es su alma Sr. Cotta
Un abrazo de alegría para cada uno de sus alumnos y otro para usted .

Jesús Cotta Lobato dijo...

Dyhego, sí. ¡Y qué bien sienta el premio después de la recompensa!
25 neutonios.

Rosna, si ellos son buenos, no me cuesta trabajo ser bueno con ellos. Lo que me costaría trabajo es no serlo con ellos. Un abrazo para usted.

Naranjito dijo...

Maestro Cotta, es facil tener esos alumnos con un profe tan "enrollao" con usted. Si encima te cuentan como copian.
Se nota una mijilla na má que disfrutas con lo que haces.
Felicidades.

Isabel Mena dijo...

Es cierto eso de la alegría y el empuje de la juventud... Cada día pierdo un poco y últimamente me doy cuenta de cuánto he perdido.
Rodearse de juventud es una gran ayuda, así que tienes más suerte que yo

Jesús Cotta Lobato dijo...

Naranjito, los alumnos, a diferencia de los adultos, casi siempre responden. Esa es la ventaja que tengo.

Isabel, ah, sí, pero tú y tu risa y tu vitalidad son la juventud misma y para siempre.

marcos dijo...

Soy también profesor. Acostumbrado a tantas quejas repetidas y huecas sobre nuestra profesión y nuestros alumnos, ¡ gracias!

Jesús Cotta Lobato dijo...

Marcos, compañero, acabo de leer las redacciones de tus alumnos sobre el recuerdo de un olor. Sabes sacar de ellos lo mejor. Gracias.

MSC dijo...

Hola,soy un alumno no de su clase, sino de la de al lado y nada más que oigo que si mi profe de griego por aquí que si mi profe de griego por acá y he de decir que si un profesor recibe tantos abrazos y elogios por parte de unos alumnos, es porque sin dudas ese profesor es grande.Espero que el recuerdo de usted quede en sus memorias por muuchos años, Enhorabuena.

Jesús Cotta Lobato dijo...

MSC, ¡vaya, conque tenía al lado un bloguero y yo sin saberlo! La próxima vez que me veas salúdame y yo haré lo mismo si te reconozco. Un saludo de colega a colega.

Alea dijo...

¡Qué alegría de alumnos y profesor!Un abrazo.

Jesús Cotta Lobato dijo...

Alea, ¡feliz fin de curso!

Sara dijo...

No van a estar contentos con el pedazo de profe que tienen. ¡Qué pájaros contándote sus técnicas de copia después de haber aprobado! Aunque estoy segura de que contigo han sido legales y que lo han sacado merecidamente. Lo mejor de esos abrazos y esa alegría es que se los guardarán para siempre, porque nunca te olvidarán, al igual que yo y seguro todos mis compañeros del año pasado. Me alegro de que todo siga yendo tan bien. Un besazo de Ariadna.

Jesús Cotta Lobato dijo...

¡Pero si eres Ariadna, la mejor traductora que he tenido! Espero que allá donde vayas rompas el molde y sigas siendo en tu carrera tan buena como en mi clase. Y tan guapa. Ex corde, tu profe.

Héctor dijo...

No me cabe ninguna duda que tus alumnos han disfrutado de tus clases más que tú... yo, como bien ha dicho Ariadna, no olvido los buenos momentos, las risas, las curiosidades, los establos... es importante también hacer mención a Ariadna, ya que estoy seguro que sin ella las clases serían más difíciles de comprender para los demás, llevaba el ritmo y lo hacia fácil, aparte de llenar la clase de buen rollo y belleza.

Un abrazo Jesús, seguimos en contacto.

Jesús Cotta Lobato dijo...

Héctor de tremolante casco, sí, qué buen grupo en clase, aunque os daba la tabarra yo con las traducciones. Espero que sigas corriendo, con tus buenos gemelos y ya me contarás cómo va tu tatuaje.

Anónimo dijo...

se le aprecia la verdad es que es usted buena gente

Jesús Cotta Lobato dijo...

Gracias, seas quien seas.

amoristad dijo...

Hola Don Jesus, que seguro le llaman así...ya podría haber tenido un profesor tan guay!!seguro que habría mirado más en mi interior...que suerte tienen sus alumnos.No cambie.Me gustó pasar por aquí!!

Jesús Cotta Lobato dijo...

Amoristad, entre el profesor y los alumnos es fácil que haya simpatía si los alumnos están en clase porque quieren. Más que mérito mío o de ellos, es de la naturaleza humana. Encantado de saludarte.