Hoy iba por la calle con un ramo de nardos y rosas rojas y me paró un bombero por la calle y me dijo: "¡Suerte! Que tenga usted mucha, que ya es difícil" y se despidió con esa sonrisa de complicidad entre hombres.
Y la verdad es que he tenido mucha, mucha suerte, si podemos llamar suerte a las mercedes recibidas, al amor, a la gracia.
Gracias a las flores y al bombero.
6 comentarios:
Don Epifanio:
Yo también me alegro de que usted haya tenido suerte.
25 neutonios suertu2.
Don Diego, le envío unos nardos virtuales.
Sin duda era un bombero enamorado.
Tocayo, desde luego era un bombero con muy buena planta. Saludos cordiales.
Precioso nanorelato, que para mí acaba con el primer punto y aparte.
Feliz septiembre, Cotta.
Me alegro, Lolo, mucho de que te guste un suceso tan breve pero real de mi vida. Feliz septiembre.
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