viernes, 30 de diciembre de 2022

Diminutivos de huevo

Huevito, huevecito y huevecillo. 

Hice una encuesta con mis alumnos y me sorprendió ver que casi todos, sin proponérselo, coincidían. Les dije que rellenaran las siguientes frases con el primer diminutivo de huevo que se les viniera a la cabeza. Las frases eran: 

a) Nene, ¿te frío un....? 
b) ¿Has visto los..... azules que ha puesto el mirlo en el nido? 
c) Mengano no ha hecho nada en toda la tarde; ahí está en el sofá rascándose los... 

Y he aquí que todos respondieron en este orden: huevito, huevecito y huevecillo. 

¿Cómo explicarle estas sutiles diferencias a un extranjero que quiere aprender español? Teniendo en cuenta que en español, la palabra "huevo" puede referirse también a los testículos, el genio popular ha buscado inconsciente y colectivamente la manera de evitar confusiones entre el alimento y los genitales, y esa manera son los diminutivos. 

Los aumentativos los dejo para otro día, cuando haga menos frío.

lunes, 19 de diciembre de 2022

La piedra Rosetta

 Y un servidor, en el excelente programa Ruta mediterránea, de Canal Sur Radio.

Aquí, con ustedes, un enlace a un fragmento en vídeo y al programa completo. A mí me entrevistan a partir del minuto 26. Y hablo un poco de la piedra Rosetta, pero sobre todo de la contribución del idioma griego al mundo.


jueves, 8 de diciembre de 2022

Tres poemas míos traducidos al griego moderno

Mi agradecimiento a Stavros Girgenis por haber traducido al griego estos tres poemas de mi libro Gorriones de acera. Aquí, para quien guste. Es para mí un honor que me puedan leer las personas que aún hablan la lengua de mi admirado Homero, en quien vivo y de quien vivo.

domingo, 4 de diciembre de 2022

Coplas a la muerte de mi tío abuelo Antonio Vargas Martín

Naciste para la espiga, 
para la madre y la novia, 
para morir entre nietos, 
con tu camisa de boda. 

Cuando ibas a la ermita, 
te quitabas el sombrero. 
Y en la fiesta de la siega, 
te regalaron un beso. 

Pero comenzó la guerra. 
Te quitaron el violín, 
te vistieron de soldado 
y te dieron un fusil. 

Tu ángel se batió entonces 
con el ángel de la muerte. 
Te mató una bala azul 
aunque eras transparente. 

Y nadie rezó en tu oído. 
Nadie conoce tu foso. 
Toda la tierra es tu tumba 
y todo el cielo tus ojos.

 (de Menos la luna y yo, Jesús Cotta)