El Islamismo es peligroso no por lo que tiene de religión, sino por lo que tiene de ideología.
La mejor manera de combatirlo es no tener miedo. Si tenemos miedo, nos callarán la boca. Rezo por los muertos. Los verdaderos mártires son ellos, no los asesinos.
La caricatura muestra la gran diferencia: Cristo separó lo del César y lo de Dios y, además, no vino a imponer ningún reino en este mundo, sino en el corazón del hombre.
El mártir cristiano es el que muere por la fe o por salvar a los demás, no el que muere matando infieles.
2 comentarios:
Don Epifanio:
Siempre hay fanáticos que se aprovechan de su religión para cometer tropelías.
25 neutonios.
Reciba usted los míos, don Dyhego.
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