Nuestra vanidad es constantemente la enemiga de nuestro amor propio.
La crisálida es la imagen del anciano: vegeta, está entumecido, ¡pero vivirá! Y es durante este sueño y esta imposibilidad pasajera cuando se forman las alas que lo llevarán a la inmortalidad.
Tener ideas es recoger flores; pensar, tejer coronas.
El arrepentimiento es el remordimiento aceptado.
Las parodias de las cosas que amo me indignan o perturban mi conciencia. Nada de lo que nos ha conmovido debe ser profanado.
Nada tan insolente como cierta indulgencia. Hay personas que te absuelven como si tuvieran derecho a condenarte.
El cielo es amar en paz.
No hay pequeñas cosas en este mundo, dado que Dios se mezcla en todas ellas.
Hay que abandonarse a Dios, sobre todo cuando parece que nos abandona.
Los milagros son los golpes de estado de Dios.
Es falso que los grandes dolores te vuelvan menos sensible a las penas ligeras.
A menudo hay que pedir consejo; no siempre para seguirlo, siempre para aclararlo.
En este mundo de vicisitudes no hay nada que venga para quedarse, nada que se vaya para desaparecer.
La muerte deja a veces tanto vacío, que la muerte no ocupa su lugar.
De ARÁNDANOS BAJO LA NIEVE, de Sofia Petrovna Soymonova, Cypress editorial
2 comentarios:
Don Epifanio:
el que más me gusta es éste:
"Tener ideas es recoger flores; pensar, tejer coronas".
25 neutonios floreci2.
Don Diego, mi favorito es ese y el penúltimo.
25 neutonios aforísticos
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