viernes, 11 de junio de 2010

Cristianos y musulmanes

Ante la creciente islamización de Europa, cuando se cierran iglesias y se abren mezquitas, suele haber una actitud hipócrita: los anticlericales no se atreven a ser con el Islam tan combativos como con el cristianismo, y aunque en su fuero interno temen a los islamistas más que a los cristianos, les puede tanto su aversión al cristianismo, que prefieren dar ventajas a los musulmanes que a los cristianos. Así, por ejemplo, los que se ríen de un cristiano por no comer carne los viernes de cuaresma, muestran un respeto muy especial por el Ramadán, y mientras se rasgan las vestiduras porque la Iglesia dice que la sodomía es pecado, hacen la vista gorda ante esos países musulmanes donde la sodomía es delito. Mientras que Cristo salvó a la adúltera de morir lapidada, Mahoma prescribe para ella unos cuantos azotes, pero es tal el miedo que la gente tiene en el cuerpo, que resulta más cómodo arremeter contra la moral sexual de la Iglesia que contra la sharía, porque como decía Stalin (¿o era Lenin?): ¿dónde están los ejércitos del Vaticano?

Sin embargo, yo encuentro razones para la esperanza: los cristianos suelen tener más hijos que los ateos, y los musulmanes más que cristianos y ateos juntos. Dentro de poco en muchos países seremos mitad y mitad y, para entonces, la convivencia y la prosperidad quizá consigan que musulmanes y europeos se contagien unos a otros no sólo de lo malo, sino también de lo bueno: mientras que los musulmanes aceptarán sin reservas la herencia cristiana de los derechos humanos, los europeos volveremos a valorar cosas como la familia y la vida del no nacido, dos cosas que los musulmanes respetan mucho. E intuyo que la globalización no volverá a traer guerras de religión, sino que la religión unirá más de lo que dividirá.

Y la cama y la comida tendrán mucho que ver en esta nueva y natural alianza de civilizaciones que sucederá hagan lo que hagan los políticos.

8 comentarios:

Dyhego dijo...

¡¡¡¡¡AAAAAAAmméééééennnnnnnnn!!!!!
1 neutonio secularizado.
¿Has pensado en que se critica con más vehemencia el cristianismo porque, en definitiva, en más nuestro? Es como cuando criticas a los hijos. ¡Ojo, yo puede llamar a mi zagal de todo, pero que a ningún hijo de vecino se le ocurra decir nada contra él!
Otro neutonio, don EPIFANIO.

El alegre "opinador" dijo...

Con lo del Islam que pone bombas te has pasado veinte pueblos... Eso es como decir que los vascos ponen bombas...
Soy católico y practicante y me molesta el ambiente anticlerical de nuestro entorno... Pero me molesta aún más el ambiente anti-todo que se respira en una jerarquía eclesiástica que da muy poco testimonio de Jesucristo y mucho del PP, que parece el nuevo catecismo.
La lectura del Corán siempre me ha resultado extraña y enriquecedora... No es, en absoluto, como pretendes hacer ver en tu entrada, porque la sharia no es ley coránica.
Espero y deseo un Islam abierto a la convivencia con las "hermanos del libro" (que es como el Corán se refiere a cristianos y judíos)... Y un cristianismo que no abomine de un Islam del que, mayoritariamente, desconoce absolutamente todo.
Un abrazo.

Jesús Cotta Lobato dijo...

Dyhego, no se me había ocurrido verlo así. Me gusta la comparación.

Alegre opinador, tienes razón. Si lees bien el artículo, se entiende que no afirmo que todo el Islam es terrorista. Ahora mismo lo corrijo. Gracias.

ReyVindiko dijo...

¡Dios te oiga! Pero no tengo yo muchas esperanzas en esa alianza. Me da la impresión de que si al final quedan en el campo sólo cristianos y musulmanes volverán a verse como enemigos y será campo de batalla.
Porque el islam dice que ha de extenderse por toda la tierra y para hacerlo ha de convertir al vecino, mediante la oración, mediante el ejemplo y, si esto no funciona, mediante la guerra. La yihad se puede entender como "Combatid en el camino de Dios a quienes os combaten" que puede parecer defensivo, pero por desgracia muchos piensan que la mejor defensa es un ataque.

Jesús Cotta Lobato dijo...

Reyvindiko, yo, sin embargo, tengo la esperanza de que el Islam, en contacto continuo con nosotros, moderará esas posturas. En fin, la esperanza no la pierdo.

lolo dijo...

Si la religión separa y no une, no me la creo.
Por eso, que Dios te escuche y tu intuición acierte. Yo también confío en que por ahí van Sus planes.

Naranjito dijo...

Maestro Cotta: en mi barrio existe una tienda de "todo a leuro", o como se diga, que es propiedad de musulmanes. Nosotros decimos "lo he comprado en el moro". La gente conoce a los dos hermanos, la esposa los hijos y la familia de estos comerciantes. Yo muchas veces, por curiosidad, les pregunto por sus costumbres, lo del cerdo, el ramadan los 5 rezos, etc. Ellos me responden con naturalidad y orgullosos de su religión. Al final, simplemente, queda la cosa en eso un comerciante que atiende a sus clientes y unos clientes que no tienen ningún problema en comprar en la tienda de un musulman. No hay religión por ningún lado, solamente personas que se respetan.

Jesús Cotta Lobato dijo...

Lolo, pues ya somos dos. Si hay prosperidad pero no decadencia, suele haber moderación. Eso espero.

Naranjito, entonces añado a mi entrada que no sólo la cama y la comida unirán a las gentes, también las tiendas. Un abrazo.