Dios encargó la elaboración de los seres vivos a unos ángeles muy imaginativos que le sacaron el máximo partido, que no otra cosa es la vida, a la materia prima e inerte que todo lo compone. Mientras que todo es muerte, a nosotros nos convirtieron en una excepción hecha de lo mismo que todo; y eso es lo sorprendente: que, sin embargo, seamos distintos de todo.
Se dieron cuenta de que si creaban criaturas autónomas, sosegadas y satisfechas, seríamos muy parecidos a la materia inerte, que, de puro satisfecha consigo misma, no hace casi nada por cambiar su situación. Así que confeccionaron criaturas incompletas, frágiles y desamparadas, que tuvieran que estar siempre haciendo algo para estar tranquilas sin conseguirlo nunca.
Por eso, nunca entenderé a esos ascetas orientales cuya máxima aspiración es no desear para no sufrir, ¡con lo bien que está el deseo por mucho que uno sufra!
Cuando los ángeles recibieron el encargo de elaborar la estatua de Adán, le llenaron el pecho de polen para que no se contentara con moverse de un lado a otro como sus hermanos los leones y las ranas, sino que necesitara siempre algo más, un algo que él nunca sabría lo que es y que yo seguiré buscando hasta que la palme.
9 comentarios:
Don EPIFANIO:
¡Ya me gustaría a mí encontrarme con uno de esos seres emplumados, que les iba yo a dar unas cuantas collejas a más de uno!
1 neutonio querubínico
(Me acuerdo que mi madre me recitaba la lista de los ángeles, pero a mí eso no se me quedaba en la cabeza: querubines, arcángeles, tronos y no sé qué, jejejeje)
Dyhego, pero qué madre tan original y tan estupenda, que se sabe las jerarquías angélicas. Estoy seguro de que eso le ha supuesto a usted un gran bien: serafines, querubines, potestades, principados, tronos, dominaciones, arcángeles y ángeles (no me sé muy bien el orden)
Que preciosidad de entrada! Tienes unas ocurrencias geniales.
Sí, nos condenaron a la incompletud y luego rodando por el mundo cada uno busca lo qué le falta, a su manera. Cada cual con su quimera, con su obsesión, con su pasión. Muchos se pierden entre tanta niebla, nadie se salva y todos somos susceptibles de extraviarnos buscando lo qué tanto anhelamos. Yo creo que por eso escribo, es una de las mejores maneras que conozco de vestirme de limpio, de ponerme en paz conmigo misma aunque al rato tenga la necesidad, como tú Jesús bien dices, de seguir buscando, incompleta siempre.
Besos y versos!!!!!!!!
Más que una ocurrencia me parece el prólogo de una antropología, by Cotta.
Más que una ocurrencia me parece el prólogo de una antropología, by Cotta.
Vale, ya lo he leído todo. ¿He dicho ya que es una entrada preciosa?
Lolo, si te gusta a ti, me doy por satisfecho. Quería yo dar a entender con ella que, al menos para mí, la vida es una búsqueda y cuando uno cree haber encontrado lo que buscaba, resulta que no, que hay que seguir.
Pero modérame, hombre.
Lolo, he puesto eso de moderar entradas antiguas, pero me estoy arrepintiendo, porque no me gusta moderarte, pero sí que me llames hombre.
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