Sugerencias para el gimnasio

1. Grabar en cada espejo "Memento mori" o "Recuerda que eres polvo y al polvo volverás". Así pasa uno del narcisismo al realismo .

2. Poner el gimnasio en una vigésima planta sin ascensor, para que el calentamiento sea subir escaleras en vez de agotarse tontamente en una bicicleta que no lleva a ningún sitio.

3. Conectar todas las máquinas a un generador de energía con el que abasteceríamos de luz al gimnasio y al barrio de los pobres.

4. Poner los nombres de los músculos en latín y no en inglés.

5. En vez de levantar mancuernas, levantar en volandas la Biblia Políglota encuadernada en bronce y madera. O bien grabar versos de Garcilaso en todas las pesas.

6. Hacer dominadas en las ramas de un árbol con un niño subido a la espalda para que pueda ver el nido del jilguero.

7. Ejercitar las piernas pisando uva y luego bebernos el jugo en copas de madera de olivo  que hemos tallado a mano.

8. Convertir la piscina en la Fontana di Trevi, pero con chorros multicolores y multidireccionales para que, al nadar, nos convirtamos en tritones, sirenas y pececitos de oro.

9. Colocar las duchas al aire libre, entre naranjos, limoneros y parras, para que nos oreemos al sol y al viento y salgamos de allí con una uva en la boca y con una flor de azahar en la barba o en la oreja.

10. Añadir a las clases de yoga, pilates y body pump clases clases de danza guerrera, de cincelazos de yunque y de lucha con un ángel, como este sello de José María Sert.