Un artículo en Posmodernia, sobre esta tendencia feísta, suicida y creciente, de creer que señalando lo feo frente a lo bello tenemos una representación más cabal del mundo. Aquí, para quien guste.
Don Epifanio: un artículo bien interesante. ¿es posible que esté funcionando, una vez más, la famosa ley del péndulo? Ahora toca, principalmente lo feo. Cuando la gente se canse de lo feo, volverá a ponerse de moda lo bonito. Digo yo. ¿Es posible que, si no se puede destacar por arriba, se intente destacar por abajo? Llamar la atención, llevar la contraria, explotar el gusto por el morbo que todos llevamos más o menos desarrollado o dominado. ¿Es posible también que, ante el grado de ñoñería que se alcanza en algunos momentos, alguien decida irse al lado oscuro? Ahora mismo vende más lo sórdido y lo procaz, sin duda alguna. 25 neutonios bonitos.
Don Diego, creo que todas las razones que usted apunta van en dirección a la verdad, y que si nos ponemos a fondo, saldría un libro. Especialmente lúcido es usted cuando dice que es más fácil destacar en lo sórdido que en lo sublime, porque nos exige menos. 25 neutonios a favor siempre de la belleza
2 comentarios:
Don Epifanio:
un artículo bien interesante.
¿es posible que esté funcionando, una vez más, la famosa ley del péndulo? Ahora toca, principalmente lo feo. Cuando la gente se canse de lo feo, volverá a ponerse de moda lo bonito. Digo yo.
¿Es posible que, si no se puede destacar por arriba, se intente destacar por abajo? Llamar la atención, llevar la contraria, explotar el gusto por el morbo que todos llevamos más o menos desarrollado o dominado.
¿Es posible también que, ante el grado de ñoñería que se alcanza en algunos momentos, alguien decida irse al lado oscuro?
Ahora mismo vende más lo sórdido y lo procaz, sin duda alguna.
25 neutonios bonitos.
Don Diego, creo que todas las razones que usted apunta van en dirección a la verdad, y que si nos ponemos a fondo, saldría un libro. Especialmente lúcido es usted cuando dice que es más fácil destacar en lo sórdido que en lo sublime, porque nos exige menos.
25 neutonios a favor siempre de la belleza
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