Una vez vi a una niña risueña levantar su taza de leche para brindar con una señora que estaba tomando café.
-Lo siento, nena -dijo la señora dándoselas de muy fina-, yo no brindo con café.
Me pareció tan estúpida la señora, que desde aquel día sometí a mucha gente a la prueba del café: si chocaban mi taza con la mía, eran de fiar, porque valoraban más la humanidad de un gesto que las convenciones.
Tranquilos: ya no someto a nadie a estas pruebas secretas, porque, a estas alturas de la vida, he perdido casi todos mis fundamentalismos. Pero cada día estoy más convencido de que las normas están hechas para el hombre, no al revés. No se hizo el hombre para el sábado, sino el sábado (también el sabadete) para el hombre.
Y quiero agradecer aquí los elogios encendidos que Dyhego ha dedicado a mis libros aquí y aquí.
18 comentarios:
Con los niños se brinda con cualquier cosa, fanta, leche...lo que sea.
Los míos dicen: "chinchamos".
Aunque somos personas y como tales vivimos rodeados de convenciones culturales, estoy completamente de acuerdo contigo en el mensaje de tu entrada. La humanidad debe saber moverse dentro de estas convenciones culturales sin perjudicarse a sí misma. Siempre, por encima de todo, las personas con educación.
Don EPIFANIO:
Para brindar necesito que las copas sean de cristal, que suene de fondo el "Libiamo" de la Traviata, a ser posible entonado por la Callas; que vayamos vestidos ellas con un escote de vértigo por delante y por detrás y nosotros con con traje, corbata y calzoncillos blancos y limpios por si acaso... Y por supuesto que las personas con las que brindo merezcan la pena, como usted, don Epifanio; y como todos ustedes y ustedAs.
Caballeras y Damos, un brindis por nuestro anfitrión, don EPIFANIO.
Los elogios que les dediqué a sus libros son "ex cordo" como gusta a usted decir. No hay ningún asomo, por mi parte, de halagarlo innecesariamente.
1.000 neutonios y ¡qué suerte la mía por haber dado de forma tonta con su bitácora!
Mejor sin fundamentalismos, si señor, o cada vez menos. Cotta, creo que con la edad nos vamos ablandando en todos los sentidos, en el moral y en el físico y llegará un momento en que Sabado, sabadete y otra vez que no toca, jejeje
Un saludo y buen fin de semana
Gerardo
Voy a la máquina de café. Vaso de plástico y café de máquina es ya el colmo, pero bueno, lo importante es la intención, y en esa llevo copa de cristal y escotazo:-)
A su salud.
Muy buen fin de semana (especialmente el sábado) a todos.
La próxima vez que quedemos brindaremos con Vega Sicila en vasos de plástico, y ese gesto corroborará nuestra enorme humanidad. Ahora bien, el resto de la botella lo beberemos en copas de borgoña.
Un abrazo.
¡SALUD!
Tocayo, chinchar de chinchín, supongo.Buen verbo.
Rubén, divinizar la norma es despreciar al hombre, salvo que la norma sea precisamente respetar al hombre.
Don Dyhego, tal como usted lo plantea, coincido en todo lo que dice. Gracias por tu brindis. Y sé que tus elogios eran sinceros.
Bueno, Gerardo, cuando no toque, rememoraremos el pasado.
Olga, siempre que podamos, vino en copas de cristal y nada de brindar con café. Ahora bien, por los niños, uno va al Mac Donald y come en plástico si hace falta. Un beso.
José Miguel, como sabemos que tú y yo somos muy humanos, nos ahorraremos lo del plástico.
Churricos, yo también brindo por la tuya.
Salud, salud, amigo Jesús.
Bien pensado lo que dices es muy correcto. Sobre todo el sabadete, y vespertino a ser egoísta.
Buen sábado y mejor brindis.
Tengo una amiga que dice que hay que beber inmediatamente y casi del tirón después del brindis, que, si no, te esperan unos cuantos años sin fo... Lo cual es una jodienda. Así, que si alguna vez me encuentro con usted en situación de brindis cafetero, espero que no esté hirviendo, porque las consecuencias pueden ser terribles par evitar postreros calentones. Un abrazo.
Yo contigo brindo con lo que haga falta, amigo: no es importante con qué, sino con quién se brinda.
Brindo por tu sábado, Javier.
Ranzzionger, cuando nos conozcamos, esperaremos a que se nos enfríe un poco el café, pero¡qué difícil nos lo pone tu amiga! Yo soy incapaz de beberme una cerveza de un sorbo tras brindar y te aseguro que la maldición de tu amiga no se cumple.
Julio, ¡eso es lo que yo digo! Ahora mismo destapo una cerveza y brindo contigo virtualmente. ¡Salud!
Si no hay normas ni reglas, no habrá quien las transgreda. ¿Qué sería de la originalidad.
Buen sabadete.
Y desde mi sábado sin sabadete ,je ...
y ....no me gusta la cerveza si serbesada ,je ...
y .... supongo que chinchín de chinchar es brindar ... uhyyy Cotta san no se le ocurra decir chinchin en la isla ...je aqui decimos Campay !!!!
y ... mi niña interna me permite brindar con helados ñam ..ñam ...
y ... llevo copas de cristal de murano para el brindis final en Canora ,obvio vestido de gasa azul ,descalza ...
Gracias por este brindis a tod@s
Yuriko
Los que disfrutan de un buen vino en vaso de plástico saben disfrutar de la vida; Los que saben disfrutar de la vida brindan hasta con un café..entonces los que disfrutan de un buen vino en vaso de plástico brindan con café. Los niños de Jesús (que también son los míos) han fusionado "brindamos" con "chinchin" y de ahí sale "chinchamos", del nuevo verbo "chinchar", como tu dices, Jesús.
Información adicional: mi marido Jesús Fidelis me dice qe especifique que él es el padre de mis hijos y no Jesús Cotta...a ver si la vamos a liar.
Miradme, es cierto. ¡El gusto que da a veces transgredir!
Maite, buena aclaración la que te ha hecho hacer tu marido mi tocayo (no sabía yo que eras su mujer), porque ya estaba yo imaginando que al decir "los hijos de Jesús que también son los míos" te referías a una especie de paternidad espiritual compartida por tener hijos que brindan con café. Un beso.
Rosna, en tu isla no diré chin chin (allí debe de ser algo terrible), pero por favor que no se te olviden esas copas de cristal para brindar en Canora. En Canora sería deseable que no haya nada de plástico.
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