martes, 26 de mayo de 2009

La cascada de Canora


Ruge en Canora una catarata de irisada espuma. Quien tiene el valor de dejarse azotar por ella las espaldas, sale de allí más alto, más guapo y más fuerte. El pelo rubio se aclara y el negro se riza. A los hombres les salen más músculos y a las mujeres más curvas. Y es tal la plenitud corporal que se siente, que durante unos tres meses anda uno como atontado, incapaz de decir algo sensato, salvo entonar himnos a Afrodita, y cada sensación acapara todas las neuronas. Según las explicaciones poéticas que me envían los exploradores afectados por ese mal o ese bien, intuyo que la cascada lo que hace es devolvernos a la pureza primigenia, la de Adán y Eva antes de probar la manzana. A las mujeres, por lo visto, les da por cantar el Put the blame on me, de Rita Hayworth, y a los hombres por torear desnudos a la luz de la luna (al parecer, hay en Canora toros o algún bicorne similar).

Pasados los seis meses, uno recobra la lucidez, pero sigue manteniendo la lozanía y la belleza y las curvas y los músculos. Yo, con tal de ser más alto, más fuerte, más bello y tener el pelo más negro y más rizado, estoy dispuesto a tontear unos seis mesecillos.


Sospecho que mis exploradores están afectados por el mal, o el bien, de la cascada. Juzguen, si no, ustedes mismos este mensaje que me acaba de llegar de ellos:


Laurelindólinan lolailo lía

tralarí tralará lipundo arándem.

¿Koraé, ubi sunt y quosque tandem?

¡Chi lo sá! ¡No lo sabe Nitutía!

24 comentarios:

Julio dijo...

Bonita entrada: para lo del pelo a mí no me vendría mal.

Abrazo, Jesús

Javier Sánchez Menéndez dijo...

Cada vez tengo más ganas de visitar ese paraíso.

Y el mensaje, lo cierto es que " no lo sabe ni el abuelo".

Un abrazo.

Olga Bernad dijo...

Creo que Canora está bien inventada, me reafirmo en mi intención de ir (¿seguro que vais a torear desnudos?). Me ha hecho gracia ver enlazado uno de mis videos preferidos. Opto pocas veces por colgar esas cosas, pero elegí ese mismito en mi última entrada del año. Eso me hace pensar que te habrás inventado Canora exactamente como a mí me gusta. Piénsala bien, lima los detalles porque una vez allí, igual ya no tiene remedio;-))) No podemos acabar como tus exploradores, por Dios, que áun no sabemos si los efectos son totalmente reversibles.
Saludos, Jesús.
(Debería existir:-)

Alejandro Muñoz dijo...

Vas a tener que organizar los turnos para la ducha en la catarata. Curioso el idioma canorés, es una mezcla extraña, suena musical y andaluz a la vez.
¿O se dice kanoré? ¡Chi lo sá!

José Miguel Ridao dijo...

Me dejas preocupado, Jesús. ¿También sale pelo? Di que sí, por favor, que si no tú y yo vamos a dar el cante toreando desnudos junto a tantos morenazos y rubiancos.

maite mangas dijo...

Me encantaría ver a tus exploradores...

Juan Antonio González Romano dijo...

Torear desnudos, qué punto. Eso sí, espero que los toros también hayan pasado por la catarata y se muestren bravos pero dóciles a las muletas; pregúntales a tus exploradores qué tales efectos producen esas aguas en los astados, antes de lanzarme al ruedo definitivamente.
Lo de las melenas no está mal, pero sin duda a ti, a Ridao y a Julio os hace mucha más falta.
Nuevo abrazo.

Jesús Cotta Lobato dijo...

Julio, ya seremos dos con pelo y vamos a fardar mucho.

Javier, seguimos en la inopia: no sabemos qué demonio les habrá pasado a los exploradores.

Olga, no sabía yo lo de Rita. Es una mujer fascinante. Pero no sé si podré transmitiros más datos sobre Canora, teniendo en cuenta lo que les ha pasado a los exploradores. A ver cuándo recobran la lucidez.

Alejandro, en la catarata hay sitio para varios a la vez, pero no se debe abusar, no sea que la belleza física nos devore por completo.

José Miguel, también los calvos podemos quedar muy bien desnuditos.

Maite, a ver si me envían más mensajes los exploradores y te cuento.

Juan Antonio, va a ser difícil meter a los toros en la cascada, pero creo que si lo conseguimos, serán unos toros muy pizpiretos, más pendientes de lo florida que les queda la cola y de las guirnaldas de los cuernos que de empitonarnos. Hay que intentarlo.

Anónimo dijo...

Ahora me lo explico: yo me debo de duchar a diario en un lugar bastante similar, y eso lo explica casi todo. Menos lo de torear desnudo, pero todo se andará. Que donde esté una buena corrida...

Jesús Cotta Lobato dijo...

Yo creo, Octavio, que la Cascada de Canora debe tener conexión directa con la ducha de tu casa. Eso explica tu éxito y lo bellas que son tus conquistas.

Jaimito dijo...

Siempre, para ingresar en una sociedad, es necesario un "ritual de paso". ¡Me apunto!

"Quien tiene el valor de dejarse azotar por ella las espaldas, sale de allí más alto, más guapo y más fuerte."

Bien vale la pena el sacrificio.

Jaimito dijo...

Parece ser un ritual un poquito más "light" que este otro, jeje

http://www.youtube.com/watch?v=TlNJcizRiPg

Saludos afectuosos, Jesús, le sigo a diario y me encantan sus entradas, las del blog digo, ¿eh?

Jesús Cotta Lobato dijo...

Querido Jaimito, qué mal se lo montan los de la peli de ese enlace. Habiendo cascadas que embellecen a cambio sólo de un poco de azote, ¿para qué las hormigas?
No sabes cuánto me halaga que te gusten mis entradas, las del blog.

ReyVindiko dijo...




Laurelindorinan. ¡Ay, Bárbol y el entiano! En mi convalecencia me he leído El señor de los anillos por sexta vez y, no sé si será herético, le pido a Dios que si voy al Cielo, antes de quedar extasiado con su rostro para siempre, me deje vivir un tiempo en la tierra media acompañado de la mano de Tolkien, y ver con Gandalf las habilidosísimas manos de Feanor en la creación de los silmarils.




Si el agua de la catarata produce esos efectos, yo también iré a Canora

Jesús Cotta Lobato dijo...

Reyvindiko, creo que me ganas por una. Yo también formulo ese deseo y estoy seguro de que se nos concederá, si no antes de ver el rostro de Dios, después.

¡Qué bien, qué bien, todos vamos a Canora! (esto, por si no te das cuenta, es un remedo del chiste de Qué bien, todos vamos a Segovia)

elpiyayo dijo...

Hay que poner 8000 Ceratonia Siliqua.
Ex corde

Mery dijo...

Creo que las mujeres vamos a protestar por aquello de que nos crezcan las curvas.
Amigo Jesús ¡si nos pasamos la vida a régimen para atenuarlas! Mejor que nos crezcan las piernas, por ejemplo.
Me llevaré los guantes largos para el canto de Rita H, ya los estoy metiendo en la maleta.

Hay que ver cómo me gusta imaginar este viaje a Canora. Gracias por ello.

Un beso

Jesús Cotta Lobato dijo...

Piyayo, hablar de los algarrobos en la bitácora ni nos hace más sabios ni resuelve el problema. En este lugar no me gusta hablar ni de trabajo ni de problemas económicos y eso no significa que no los tenga presentes o que no viva en la tierra. Precisamente para olvidar los algarrobos, entre otras cosas, es por lo que abrí una bitácora. En Canora la JUnta no tiene aún jurisdicción. Pero, en fin, ya sabes que a ti te lo consiento casi todo. Así que tienes venia para hablar de los algarrobos cuando te dé la gana. Seguro que así se arregla todo.

Mery, en un informe de mis exploradoras, consta que ellas están muy conformes con la transformación que ha surtido en ellas la cascada. Se ve que, a pesar de las curvas, no han aumentado de volumen ni de peso, sino de altura y de belleza. Un beso.

churricos dijo...

Sr. Cotta.
Es de suponer que hace falta valor, para dejarse azotar por tan salvaje corriente. Me imagino que una de las caracteristicas para iniciar el viaje, es tener arrojo suficiente para enfrentarse a tan arriesgada empresa, teniendo en cuenta que la información de la que se dispone, es la enviada por los exploradores. Y, honestamente, si yo me encontrase en el pellejo de alguno de ellos, en un lugar como ese, no daria detalles acerca de la realidad que allí se vive. Puede ser un acto de sumo egoismo, pero preferiria traicionar a quien me envia, que arriesgarme a corromper el equilibrio de Canora. No obstante, confio en que sus exploradores, tengas mas escrupulos que un servidor, y le sean leales, contandoloe toda la verdad de ese lugar.
En principio, mi idea era opinar acerca de torear desnudo a la luz de la luna (me recordó a un libro que leí hace ya algún tiempo...)pero, los avatares del destino son impredecibles.
Un saludo.

Jesús Cotta Lobato dijo...

Churricos, no hay que fiarse mucho de los exploradores. Al parecer siguen afectados por la cascada. En cuanto a torear desnudo a la luz de la luna, espero que no haya peligro para el toro ni para el torero. Más que una tauromaquia, sería una teomaquia con espadas de luz, inocuas. Eso espero.

Rosna dijo...

Las noticias que le llegan de Canora son auténticas , ella es el evrdadero amor y dicen que cuando se llega a su playa secreta una magía envuelve el alma , es tan fuerte que no se puede ser voluble , ni se estar supeditado a ningún cambio , es ,ha sido y será lo que el universo forjó con supremo arte y emoción .
Le dejo ..... pero no me voy ...
Rosna
Rosana Gabriela Yuriko

Cotta san , tal vez pueda tatuarme Canora , en mi cabeza ... dibujar cada pedacito de la mágica isla de mis sueños perdidos .
Un abrazo a su alma

Rosna dijo...

Pd : corregir ... VERDADERO ...

Máster en nubes dijo...

Perdón, llego tarde como siempre y tengo que decir que ¡me encanta que se nos aumenten las curvas, mil gracias por semejante cosa, voy a Canora pero seguro, seguro!
Un abrazo, y mira que yo probando con pilates con lo fácil que es Canora y como las mujeres de verdad, que tienen curvas ;-)

Un abrazo
Aurora

Jesús Cotta Lobato dijo...

Rosna, tú eres sin duda una de las exploradoras de Canora. La conoces como la palma de tu mano. No hace falta que te la tatúes. La llevas en el corazón.

Aurora, los hombres con sus músculos y las mujeres con sus curvas. Vive la diference!