viernes, 14 de enero de 2011

¡He arreglado otra cosa!

Amigos, no doy crédito a mí mismo. Parece que soy otro. Quizá me hayan abducido en sueños: ¡he arreglado el bote sifónico del cuarto de baño! ¿No es increíble?

Hasta ahora, mi única función de macho en la casa era matar los mosquitos y abrir las tapaderas difíciles, pero ahora me atrevo incluso con algunos cacharritos.

Yo no sabía siquiera que había un bote sifónico en mi baño. Reparé en él cuando el embellecedor salió disparado como un disco por mi pie y me quedé a cuadros cuando encontré un agujero sucio y oscuro que se adentraba en las profundidades, ni más ni menos que en el cuarto de baño, ese templo de la higiene y la pulcritud.

Cuando me dijeron que se llamaba bote sifónico, yo entendí bote sinfónico y me imaginé una especie de letrina donde las burbujas de aguas biológicas producían sinfonías escatológicas que había que silenciar para poder seguir oyendo la música de las esferas, que es la que a mí me gusta.

El dueño de la tienda de artículos de fontanería de mi calle estaba hoy contento porque era viernes y había salido el sol. Y estaba cantando y me ha atendido con toda la alegría del mundo y me ha dado las explicaciones justas que un tipo despistado como yo necesitaba. Loado sea por siempre. Amén.

Y cuando he rematado la faena, he llamado a todo el mundo para que lo viera. Estoy tan satisfecho como cuando remato un soneto.

Estoy pensando componer un himno al bote sifónico y a su inventor. Ya que hay un día internacional del huevo, debería haberlo también del bote sifónico y, por supuesto, del sinfónico.

22 comentarios:

Ignacio dijo...

Cotta:
¡Me tienes muy preocupado!

Jesús Cotta Lobato dijo...

Ignacio, ¡es para preocuparse! Debe ser que tengo más testosterona de la que pensaba.

Fernando Moral dijo...

Jesús, de ahí a adueñarse del mando de tv y rascarse el trasero en público no hay casi nada. Qué horror. Más vale que te plantes ya.

Un abrazo.

Jesús Cotta Lobato dijo...

Fernando, el mando de la tv sigue siendo un misterio para mí, así que por ahora no hay peligro de rascarme el trasero en público, pero lo tendré en cuenta. COn la próxima cosa que se rompa, me vestiré de príncipe para arreglarla, con música clásica de fondo, para no masculinizarme en demasía.

José Miguel Ridao dijo...

Pues no creas, que el bote sifónico es un ejemplo de lo más simple del mundo pero ingeniosísimo. Sin él nuestros detritos refluirían, y los efluvios serían insoportables. Es lo que pasaba antes. Mi enhorabuena.

JSM dijo...

¿El bote de qué...?

Jesús Cotta Lobato dijo...

Ridao, junto a los consabidos monumentos egregios de las ciudades, debería haber, pues, un monumento a inventores como el que se inventó el bote sifónico, el hilo dental, la fregona y todas esas cosas que nos hacen la vida más agradable.

JSM, no te preocupes. Yo he vivido taypico años sin saber qué era y mi vida no ha dado un giro desde que lo sé, así que no te pierdes nada por no saber que existe un agujero en cada baño para que no pase eso que dice Monsier Ridao.

Retablo de la Vida Antigua dijo...

Es una maravilla todo esto que usted escribe. Bote sifónico: tiene nombre de artificio del tiempo de Julio Verne.

Saludos cordiales señor Cotta.

José M. Martínez dijo...

Jesús, si sigues a este paso, creo que te conviene ir poniendo un taller para arreglar chapucillas caseras. Te puedes hacer de oro...

lolo dijo...

Primero fué el interruptor de la cocina, ahora el bote sifónico... te esperan grandes aventuras, Cotta. Lo de vestirte de principe no está mal, pero un mono azul bastaría.

eres_mi_cruz dijo...

estás sacando el albañil que llevas dentro... de hecho todos los albañiles de España dicen bote sinfónico...
¡ánimo, machote!...

Jesús Cotta Lobato dijo...

Retablo, es un nombre demasiado bonito para algo tan feo y oscuro, pero como es tan práctico, se lo merece.

José M., a tanto no puedo aspirar. Sé de otros hombres que no sólo arreglan cosas, ¡sino que incluso las hacen! Yo no les llegaré jamás a la suela de los zapatos.

Eresmicruz, ese albañil estaba vivo cuando yo era niño y los Reyes Magos me echaron el Mecano Metalín. Luego lo mató la poesía y ahora poesía y albañilería han descubierto que se llevan bien. Y me gusta lo de machote. Así me llamaba alguien a quien quiero mucho.

Lolo, precisamente de monos azules va mi siguiente libro. Tienes la virtud de adivinarme.

Lolo,
me

Dyhego dijo...

Don EPIFANIO:
Leyendo su entrada me he imaginado que era usted Benito, el de "Manolo y Benito" y me ha dado por reirme y todo.
¡Me hacía gracia a mí aquella serie!
¡Ya me lo imagino a usted con la tirolesa echando gotelé en las columnas del Partenón, pa que se quede más bonico!
Propongo hacer una colecta para comprarle a usted un mono, una gorra, un lápiz para la oreja y una fiambrera.
25 neutonios trifásicos.

Jesús Cotta Lobato dijo...

Dyhego, que no se te olviden las cervecitas y el palillo de dientes. ¡Va a quedar el Partenón superbonico! ¡Y qué tino tiene usted adjetivando neutonios! Es para mí un honor ese hallazgo literario que usted prodiga en mi blog.

Lolo, se me fue el dedo y salió ese "Lolo, me", que no le he borrado porque me gusta.

No cogé ventaja, ¡miarma! dijo...

Jesús, ten cuidado no te vayas a pasar de macho, sabes que ahora no están excesivamente bien visto.
Felicidades, saludos.

Naranjito dijo...

No se me enfade D. Jesus, pero por un momento me lo he imaginado de rodillas, con el pantanlon un poquito por debajo de su normal posición, enseñando hucha (con perdón) y cantando aquello de ....soy mineroooo.
Un saludo y ahora a cambiar la bombilla del pasillo.

Jesús Cotta Lobato dijo...

No está mal la escenita. Promete y la probaré. Ya le contaré.

Jesús Cotta Lobato dijo...

No cogé ventaja, no te preocupes. Me temo que lo del bote sifónico es un episodio aislado. Un minuto después de arreglar el bote, ya estaba escribiendo versos. Un abrazo.

Máster en nubes dijo...

Jesús, yo ya te admiraba antes por muchísimas cosas -como padre, como profesor, escritor, hijo, etc.- Pero esto, ¡esto!, supera las pruebas de Hércules, por Dios. La capacidad de arreglar lo que se rompe en una casa es envidiable. Un abrazo

Jesús Cotta Lobato dijo...

Aurora, admírame poco en esa faceta. Si supieras lo simple que ha sido arreglar el bote sifónico... Tú eres más manita que yo, ¡seguro! Un beso.

Jaimemarlow dijo...

Don Jesús, me acaba de sacar de una duda que tenía desde que me alcanza la memoria. ¿Qué hay debajo de esa chapita que parece estar atornillada al suelo de mi cuarto de baño? Pues nada más y nada menos que el bote sifónico.
Qué cosas...

Jesús Cotta Lobato dijo...

Jaime, sin el bote sifónico no se podría estar en el cuarto de baño, pero se puede vivir perfectamente sin saber que existe. Un abrazo y feliz año.