sábado, 4 de marzo de 2017

El poema de la semana

Contra mi costumbre, envío hoy un poema triste, muy triste, pero lo pongo aquí por dos razones. La primera es que me parece buenísimo y representativo de la desesperanza que a todos nos ha oscurecido alguna vez. La segunda es que es de mi hermano Daniel.

En esa pared blanca y encalada
veo un puntito negro, sólo un punto,
y pienso y pienso tanto en ese punto
que sólo veo punto en la fachada.

Veja y maltrata, pero ¡cuánto agrada
dejarse fornicar por ese punto,
que viole a mis cerebros hasta el punto
de serlo todo él; lo demás, nada!

Un punto, un punto negro desintegra
y vampiriza mi alegría. Un punto
que vuelve una pared de blanca en negra.

Un punto que es un universo.
Un punto se está comiendo mi existencia.
Un punto va a devorar a Dios, un punto, un punto.

(Daniel Cotta, de Alma inmortalmente enferma)

2 comentarios:

Daniel Cotta dijo...

Siempre agradecido por tu incondicional entusiasmo.

Rosna dijo...

Pasar por su blog siempre es una brisa para el alma . Profundo , real este poema que compare al vacío ...Que estoy transitando es no permitir que la oscuridad nos atrape caer , sentir el vacío es necesario para surgir con fuerza y pasión hacia la luz
Un cálido saludo