lunes, 23 de marzo de 2009

Afrorismos XII

1. Si después de unas cuantas copas de vino no se puede hablar de todo, es mejor no beber.
2. El genio es un discípulo que superó a sus maestros, más que un maestro que no fue superado por sus discípulos.
3. No ocultar ni ostentar, sino ser.
4. Sudar no es elegante, pero los elegantes lo son incluso sudando.
5. El conservador quiere cambiar las cosas que el progresista ha cambiado y quiere conservar.
6. Desconfía de los filósofos que se inventan palabras.
7. El sexo es importantísimo, sobre todo si uno no lo practica.
8. La bondad y la felicidad hacen malas novelas, pero vidas buenas y felices.
9. Folgar para amar, en vez de amar para folgar. Ése es el truquito (y digo folgar, porque me da cosilla decir el otro verbo).

19 comentarios:

enrique baltanás dijo...

Me ha gustado mucho el 6.

Sobre el 10: C. J. Cela recomendaba otro verbo, precioso por cierto: yogar.

Juanma dijo...

El 2 es una delicia que uno practica con frecuencia. El 5 me ha traído a la memoria a Cary Grant. El 6 es una verdad como un templo así de grande. El 7 da para desconfiar de muchos filósofos, algunos de toda confianza.

Un abrazo, querido Jesús.

Javier Sánchez Menéndez dijo...

Buenos días Jesús. Me alegro volver a leerte. Me ha gustado el pensamiento que trasladas en la entrada. Sobre el 7, he recordado a Luis Rosales. No como filósofo, sino como poeta. Inventó unas palabras, unos términos (recuerdo ahora en "Oigo el silencio universal del miedo" el término "suai")que asocias rápidamente a alguno ya existente, o tal vez, después de inventar el término, descubres que no existe otra palabra para describir lo que realmente quería decir.
Haces pensar, Jesús.
Un fuerte abrazo y buen día.

Olga Bernad dijo...

Me gusta el 4º y el 5º y no estoy muy de acuerdo con el 10º. Además, para "folgar", así, con ese matiz como medieval, parece que haya que ponerse a estudiar antes y eso no llama en primavera, estoy segura; yogar... no lo sé, es una novedad.
Saludos, Jesús, buen inicio de semana.

Juan Antonio González Romano dijo...

Alguna vez he reflexionado yo en mi bloog sobre el 6º. Tú dices en una línea lo que yo tardé más en explicar...
El 7 también se puede aplicar a los políticos. Y quedaría así: Desconfía de los políticos (lo de "que se inventan palabras" es redundante).
Enhorabuena por todos los aforismos. El fin de semana te ha sido propico, amigo.
Un abrazo.

eres_mi_cruz dijo...

Si 10. es un cambio de actitud,
por 1. resulta que
folgar no es un problema,
luego 8. es discutible...
sólo adquiere sentido negando 4....
o por 5. para no sudar y parecer elegante,
un simple esnobismo...

y dices folgar... luego deconfío de ti por 7....
y del puto Camilojosé...
pero conste que voy con 2. copas 2.

Alonso CM dijo...

Sin duda me quedo con el 4. Parece como si la suciedad española hubiera vuelto al siglo XVII. Todo es ocultamiento y apariencia, pero nada es como realmente es. Muy fino, Jesús.

José Miguel Ridao dijo...

El que más me gusta de lejos es el 6, y el 9 es una verdad como un piano de grande.

Jesús Cotta Lobato dijo...

Baltanás, el seis me costó trabajo escribirlo. Le di muchas vueltas. Sobre el verbo yogar, es magnífico. El que usamos entre amigos es más claro, pero es tan fuerte...

Juanma, a ver cuándo practicamos los dos el dos.

Javier, los poetas sí que pueden inventar palabras, porque al hacerlo no nos las dan con queso. Me gusta lo suai.

No sé por qué, intuí, Olga, que el seis te iba a gustar. El diez lo tendríamos que discutir.

Juan Antonio, tu reelaboración del 7 es magnífica. Lleva implícita la definición: político: personaje que se inventa palabras.

Eresmicruz, ¡me has psicoanalizado y eso que llevas dos copas! Y yo que pensaba que no había conexión entre unos aforismos y otros y ahora resulta que tú les has encontrado los engranajes. Un abrazo.

Miradmealmenos, ese lo escribí para automedicarme. Nunca tengo muy claro si decir lo que pienso según con quién me encuentre. Un abrazo.

El seis lo descubrí, José MIguel, durante una conversación donde quien decía ser progresista me pareció menos revolucionario que quien decía ser conservador. Un abrazo

Anónimo dijo...

Con todos mis respetos, admirado Jesús, "folgar" es, además de lo que estamos pensando, 'estar ocioso, no trabajar' (DRAE). Usar "yogar" sería rescatar un arcaísmo, si bien es estupendo (es un verbo muy curioso, permíteme el alarde erudito, porque procede del pretérito de "yacer", "yogo", de que, a su vez, se genera un nuevo verbo, dada su disimilitud con la raíz del infiniitivo, toma ya). Así que, a mi modesto entender, un buej "follar" hubiese quedado más castizo. Dicho lo cual, corroboro el décimo, mucho mejor que el sexto (mandamiento, en este caso), dónde va a parar.
Y el 8 es totalmente cierto también. Podría reformularse diciendo que el jamón es importantísimmo, sobre todo si uno no lo come. Lo cual no quiere decir que no me encante el jamón. Y follar, por supuesto.

Con perdón, claro.

Outsider friar dijo...

2bis. Si sólo se es capaz de hablar de todo después de unas cuantas copas de vino, también es mejor no beber.
2ter. Si después de unas cuantas copas de vino no se puede hablar DEL todo (es decir, en lenguaje mínimamente inteligible), también es mejor no beber.
El 4 es un error, ya que:
a)Ocultar y ostentar son acciones voluntarias, mientras que generalmente ser no depende sólo de la sola voluntad, aunque es verdadero que b) nuestro ocultar y nuestro ostentar nos hacen ser también aquello que somos.
Si el 8 fuese cierto, vivimos en un mundo con inmensa mayoría de no practicantes (!).

Jesús Cotta Lobato dijo...

Me rindo ante tu autoridad en este asunto, Octavio. Debería haber dicho follar. Así lo escribí al principio, pero me pareció impropio del blog. Me alegro de que te gusten los aforismos del amor. Señal de que no voy descaminado.

Jesús Cotta Lobato dijo...

Outsider Friar, estoy impresionado por la agudeza de tu comentario. Es cierto: si para hablar con libertad tengo que beber, es que tengo un problema. Pero yo quería decir que, puesto que en la vida cotidiana y sobria nos andamos con tantos tapujos, al menos cuando bebamos seamos sinceros, ya que nos tomamos la molestia de emborracharnos a costa de la salud.
En cuanto al de ostentar y ocultar, reconozco que, como bien has demostrado, es un aforismo que convence antes al oído que a la razón, porque no es tan fácil ser.

Y respecto al ocho, no sé, siempre he tenido la impresión de que en esta época se habla tanto de sexo y se le adora tanto porque lo practicamos menos que nuestros abuelos, que no hablaban tanto de él. Pero aquí me rindo ante tu conocimiento: el padre Brown sabía más de los secretos del hombre que todos los psicólogos y blogueros del mundo. Y gracias por venir.

Mirna dijo...

El 1 es una gran verdad. La mayoría de las veces el problema principal somos nosotros mismos.
Del 2 ya sabrás que prefiero no opinar, porque estoy demasiado de acuerdo, además si el tema de la conversación es la falta de práctica del 8, mejor, vámonos.
Con el 5 no estoy de acuerdo, jamás nadie me ha parecido elegante con el surco húmedo bajo el brazo (ni siquiera Cary Grant).
Y por último, con respecto al 9, tú, ¿con qué te quedas, Jesús? Creo que lo tengo claro.
Un beso.

Jesús Cotta Lobato dijo...

Pues la verdad, Mirna, ahora que lo dices, la mancha de humedad axilar no me parece elegante ni en Coco Chanel. Y respecto al nueve, me quedo con las vidas buenas y felices. Y me alegro de que te hayas hecho bloguera. Te he puesto en mi lista de bitácoras. Un beso

Er Tato dijo...

Visto el título, esperaba encontrarme con aforismos africanos. Tras entrar, me he dado cuenta de que era una errata. Da igua, porque siempre merece la pena leer tus aforismos.

Un abrazo

Jesús Cotta Lobato dijo...

No es mala idea esa de aforismos XLL. Te tomo la idea y haré un elogio del tamaño.

Mery dijo...

Es que el verbo del 10 es reamente poco elegante y sudando además, menos elegante aún.

Y una pregunta ¿tenemos que desconfiar de tí por tus diccionarios? No lo creo, así que el 7 no ha lugar. Que conste en acta.

Jesús Cotta Lobato dijo...

¡Ay Mery, el aforista atrapado en su propia trampa, tomando de su propia medicina!