martes, 17 de marzo de 2009

Aprenda a decir que no

Si es usted de esos que es capaz de pelar un quilo de pipas de girasol sólo porque se lo piden por favor; si es usted de esos pringaos que, por no llevar la contraria, vota al mismo partido que su jefe y está de acuerdo con todas las tonterías que dicen los políticos, apúntese al método TOTAL para aprender a decir que no.

1. Búsquese una novia y llévela al altar.

2. Cuando el cura le pregunte si la acepta por esposa, diga usted que no.

3. Cuando a la novia le dé un patatús y el cura ponga cara de mala leche, diga usted que era todo una broma, que estaba usted ejercitándose en el método TOTAL, y, tranquilo, todos lo entenderán.

Ah, y respondiendo a la pregunta de Dyhego, que me preguntaba cómo es que escribo todas mis entradas a las siete de la mañana, la respuesta es que las programo para que salgan a esa hora, de las noches a los días. Y otras veces sí que las escribo a esa hora. Si no tuviera que ir a trabajar, esa hora es para mí la mejor. Un abrazo a todos.

21 comentarios:

Máster en nubes dijo...

Genial, Jesús, ¿el método tiene algún paso más de los 3? Lo digo para los que han superado dichos pasos... y les sigue costando decir que no ;-)
Un abrazo
Aurora

Juan Carlos Garrido dijo...

Es posible que este método también sirva para devolver al altar su misión primigenia (inmolar víctimas propiciatorias).

Conozco un caso de alguien que dijo que no en el altar por una apuesta con los amigotes. Cuando quiso volver a casarse, el obispo le impuso, como penitencia y puesto que se había comportado como un chiquillo, acudir un año a catequesis junto con los niños más pequeños.

Saludos.

Juan Antonio González Romano dijo...

El método es drástico, pero eficaz. Pero convendría "coeducarlo" y afirmar que también es válido para las señoras: Búsquese un novio... cuando se le pregunte si lo acepta por esposo...
Después está la prueba de aprendizaje: le ofrecen a usted un plato de jamón 5j convenientemente cortado. Si usted es capaz de decir "no", ha superado la prueba.
Y ahora digo yo: en ciertos casos, ¿conviene decir que no?
Buen día, Jesús.

Dyhego dijo...

SOMBRAS CHINESCAS: Yo mandaría al obispo de marras a quitarse el disfraz, a escuchar a los demás y a no soltar ningún discursermón no durante un año sino durante un lustro. ¡Por lo menos!

¡Ay! Jesusito Epifanio de mi vida y de mi corazón. Soy tan rematadamente gilipollas que me cuesta un montón decir que no y así me va: todo Dios subiéndose a mi chepa y aprovechándose. Voy dando avances pero me cuesta mucho.

Gracias por ser tan majo y responder siempre a todo el mundo, aunque yo sea un pesado. Otra preguntita: ¿cómo se programa el chisme éste para que los comentarios salgan a la hora que tú desees?
Un apretón de manos, pero de esos fuertes, fuertes, de por lo menos un newton.

Juanma dijo...

De acuerdo, Jesús, seguiré tu método, creo que lo necesito imperiosamente: sí.

Un abrazo, querido Jesús.

Granito dijo...

Buena idea, yo haría ademas que un grupo de amigos cantara a coro:

"Que no, que no, que el pensamiento
no puede tomar asiento,
que el pensamiento es estar
siempre de paso, de paso..."

Y después de explicar la broma adptandose esa otra de:

"Si tu me dices ven, no hay un "no" para ti"

Y si aún así me rechaza pues a otra cosa mariposa, que una esposa sin sentido del humor debe ser muy pesado, ¿no?.

Jesús Cotta Lobato dijo...

Me temo, Aurora, que el método no tiene más pasos. Los que tras esos tres pasos seguimos diciendo que sí, ya no tenemos arreglo. Lo mejor es seguir diciendo que sí. Un abrazo.

Sombras chinescas, demasiada poca penitencia le impuso el obispo a ese hombre. Yo también le habría impuesto como penitencia decir que no durante un año a cualquier placer venéreo.

Juan Antonio, me planteé lo de la versión coeducativa del método, pero ya sabes cuán hartos estamos de coeduca en el gremio. Y me temo que yo diré que sí al jamón y a cuanto se le parezca, con lo cual te doy la razón. ¡Digamos sí!

Dyhego, el newton me ha dejado baldado, pero aun así te contesto.Soy un negado con la informática, pero al menos en mi versión de blogger, cuando uno le da a "nueva entrada" hay debajo una opción llamada "opciones de entrada". Uno la pincha y puede ponerle la fecha y hora que uno desea, por ejemplo, en el año 2080, cuando estemos criando jaramagos.

Juanma, me identifico con ese sí tuyo. Yo también necesito el método.

Granito, mi método ha quedado bastante mejorado con tus canciones. Seguro que si le cantamos a la novia, no se enfada.

Rosna dijo...

Para mí , no existen métodos :
No es No , sin dañar a nadie y sin sentir culpa .
Rosna

Anónimo dijo...

Yo a una buena mujer (valga la redundancia) nunca le digo que no, hasta ahí podíamos llegar.

Jesús Cotta Lobato dijo...

No todos lo tenemos tan claro, pero así es, Rosna.

Ya me estaba viendo venir tu respuesta, Octavio. Lo de la redundancia es un piropazo a la mujer.

Rosna dijo...

Por cierto Cotta san ...puedo llevarme su poema Yo soy el río ...???? que me responde ...?
Graciassssssssssssss ...
Rosna

Jesús Cotta Lobato dijo...

Por supuesto, Rosna. Es suyo.

Dyhego dijo...

Don Jesús,
gracias por su explicación bloguera. Ya sé cómo se hace.
¿Y dice usted que no entiende?

En 1º de BUP tuve un profesor de Gimnasia llamado Epifanio. Lo recuerdo con cariño porque yo era nefasto para los deportes. Tenía que jugar a la fuerza a balonmano y los compañeros no me pasaban la pelota porque yo era malísimo y cuando lo hacían la perdía. Un fracaso. Una vez que llovió y nos quedamos en el aula, Epifanio comentaba que había un alumno al que no se le pasaban los balones, que él corría de aquí para allá etc. Pasó la mirado por todos nosotros hasta que me localizó pero no sé si porque no me reconoció sin chándal o porque no quiso avergonzarme delante del resto de compañeros, el caso es que dijo: no, si aquí no está.
Yo siempre quise creer que lo había hecho por delicadeza a mi nulidad deportiva y por eso, después de tantos años, me acuerdo de él, por asociación de ideas con su nombre.
Espero no haberme ido por las ramas.
Un saludo.

Jesús Cotta Lobato dijo...

Bonita historia, Dyhego. COntar cosas buenas de las buenas personas nunca es irse por las ramas. Me alegro de compartir nombre con tu profe.

Dyhego dijo...
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
Dyhego dijo...

Don Jesús:
No tengo derecho a robarle su tiempo ni a incordiar así que me retiraré discretamente durante un tiempo (aunque seguiré leyendo sus interesantes aportaciones).
Un "newton".

El Africanito dijo...

Lo mejor es decir que si cuando queramos decir que si. Decir que no cuando queramos que no y no, si cuando no o no cuando si.

la prueba que expones es durilla,
el que consiga pasarla podrá después decir con toda tranquilidad "no" o "si" a lo que quiera.

Ah, y yo también creía que te levantabas con tiempo para lanzar la edición justo a las 7, que inocentón

Te anexo dos palabras para el diccionario.
henga - cuando alguien te propone poner en práctica alguna idea en la que estás de acuerdo de hacerla ya.
amo - vamos del verbo ir.
por ejemplo:
-Oye niño, amo tomahno una cervezita con anchoita?
-enga amo.

un saludo mu apretao

Jesús Cotta Lobato dijo...

Dyhego, no me haces perder el tiempo. Si tengo una bitácora es para vosotros. Recibido el newton.

Africanito, ya que me regalas esas palabras para el diccionario, a ver si la semana que viene las pongo. Gracias.

elpiyayo dijo...

Dificil tarea el decir que no, no se lo que ocurre, que decir que no a una persona a la que amas cuando crees que haces un bien al negar, es lo más dificil que existe. Decir que no a un extraño es menos dificil. Cunado se es joven se puede decir un no suave, es como un siiiiiiii muy flojito, cuando se tienen 50 tacos, se dice que no o "que NOOOOOOOO me cago en la má". A las mujeres le es más facil decir que no que a los hombres, es una de las cosas que a mi más me gusta, me sorprende y me entusiasma, siempre es un reto.
Pero yo siempre tengo la ultima palabra en mi matrimonio "si cariño lo que tu digas".

Jesús Cotta Lobato dijo...

Piyayo, me tienes que explicar mejor eso de que las mujeres dicen más fácilmente que no que los hombres. Y, ay, sí, qué trabajito cuesta decir que no a quien amas. Un abrazo

Dyhego dijo...

Gracias, don Jesús.
Ya sabes por qué.
2 newtones.