Durante una excursión de verano, en Grecia, conocí a un albanés. Me preguntó de dónde era yo y yo, para jugar un poco, le propuse que lo adivinara. Muy serio, me respondió:
-No juego a las adivinanzas.
Un poco estupefacto por su respuesta, me apresuré a decirle que era español. Y entonces él me propuso un juego que a él sí le gustaba: cada uno tenía que decir lo que sabía del país del otro. Y muy entusiasmado comenzó su retahíla:
-Toros, Buñuel, Sagrada Familia, Isabel y Fernando, Picasso, Dalí, paella...
Y cuando terminó, me tocó a mí decir lo que sabía de Albania. Pero yo sólo sabía que en Albania se hablaba albanés, lengua de origen indoeuropeo, y que allí vivían los albaneses. Punto. Bueno, sabía algo de su férreo régimen político, pero me guardé de decírselo. Menos mal que no se tomó a mal mi ignorancia, porque resulta que era un albanés de origen griego y se sentía griego, no albanés. De hecho se llamaba Aristóteles.
Si yo me llamara Aristóteles y tuviera que vivir en Albania, lo primero que habría hecho, como Aristóteles, es huir a Grecia.
24 comentarios:
Y lo habrías hecho impulsado por el Motor Inmóvil.
Un abrazo, querido Jesús.
Sí, nunca mejor dicho, amigo filósofo.
He estado leyendo las últimas entradas de tu blog, permíteme que te haga un comentario general. Me han gustado mucho, cada una de ellas con sus peculiaridades. Lo que tienen en común es que son reflexivas, que tras la lectura te mantienen unos segundos con la mente en algún lugar perdido de la memoria, que son concisas, precisas y bien escritas. Es un paseo muy agradable el que se inicia al pinchar en tu blog.
Un saludo.
Además de coincidir con María, apunto que si yo hubiera vivido una circunstancia similar, poco o nada habría sabido decir de Albania (al menos, no habría dicho que era el ex marido de Romina Power, eso sí). Una compañaera de mi hija pequeña es albanesa; los padres hacen maravillas para poder adaptarse al "mundo libre" (son sus palabras) y lo que cuentan de su país es desolador. Un detalle muy significativo: al venir a Sevilla buscaron el alojamiento más barato posible en un barrio con buenos colegios para su hija: por su educación sacrifican todo lo demás. Viven en un modestísimo piso, con lo mínimo imprescindible, con tal de que su hija reciba una buena educación. Más de uno debería tomar nota.
Poco sabemos de Albania, pero no sólo nosotros. ¿Os acordais de la película "La cortina de humo", con Dustin Hoffman y Robert de Niro? En esta ácida comedia los asesores del presidente norteamericano, para distraer la atención sobre un escándalo de tipo sexual, se sacaron de la manga una guerra... ¿contra quién? Pues contra Albania, porque nadie sabía un pimiento acerca de aquel remoto y lejano país.
Jaimito
Yo a Albania la identifico con una isla comunista pero pobre, una especie de Las Hurdes marxista. Si me encuentro con Aristóteles, igual se lo largo. Es curioso, es la tercera persona que oigo que se llame Áristóteles, el segundo era Onassis. Sócrates hay más, pero no conozco a ningún Platón. Un abrazo.
María, si de algún modo me gusta que definan a mi bitácora, es como tú lo haces. ¡A ver si lo consigo! Y mis puertas están abiertas para ti.
Juan Antonio, lo que hacen esos padres es lo que deberíamos hacer todos. A veces veo a mis alumnos inmigrantes aprovechando mucho mejor que los españoles la educación pública y gratuita y a veces les digo: Cuando el médico que os atienda sea ecuatoriano, no digáis que os quitan los puestos de trabajo, porque nadie os ha impedio llegar a médicos, sino al contrario.
Jaimito, te voy a tener que nombrar mi asesor cinematográfico. Siempre recuerdas una buena película.
José Miguel, me temo que moriremos sin conocer a un Platón. Por cierto, el primer Aristóteles que conoces, que no lo dices, ¿es el filósofo, el Estagirita?
Sí, claro, el Estagirita. Estaría bueno que identificara el nombre de Aristóteles con Onassis, aunque casos peores se han visto. Recuerdo una amiga mía que me dijo que cómo le gustaba el Himno de la Alegría, compuesto por Miguel Ríos. Un abrazo.
La verdad es que Albania es uno de los grandes desconocidos de Europa, aunque no una isla; algo así como la Corea del norte europea en su día, por su régimen imprenetable. Eso y que nos tocó en alguna ronda clasifocatoria para mundial o eurocopa, o que muchos de sus ciudadanos huían cuando el régimen cayó a Italia; cosa que refleja una estupenda película italiana de Gianni Amelio, "Lamerica".
En cuanto a lo de los nombres de los filósosofos, a principio de los 80 era más conocido el futbolista brasileño Sócrates, que el maestro de Platón; y qué decir de Schopenhauer, al que muchos pueden confundir con un nuevo embutido de Campofrío.
Hola,
Albania es un nombre bonito aunque es verdad que se suele nombrar poco, sin embargo es bueno pasar desapercibido tanto para lo bueno como para lo malo.
He leido que fue el primer país en eliminar las armas químicas en 2007 eso demuestra buena intención.
Ranzzionger me he reido pensando que pido 1/4 de schopenhauer en la charcutería.
un saludo.
Me informa la profesora de griego moderno del Instituto de Idiomas de que en griego sí es un nombre de pila Πλἀτωνας, Plátonas. Y se me olvidaba decir que la madre Teresa de Calcuta era albanesa: con ella puede estar ALbania orgullosa.
Razzionger, nunca se me había ocurrido sacarle ese chiste a Schopenhauer: se lo merece, por pesimista.
Gracias, Africanito, por el dato. Ya tenemos dos cosas buenas de ALbania: supresión de armas químicas y la madre Teresa.
Ese último comentario lo he hecho yo, Jesús, pero no sé por qué diablos sale anónimo.
Me temo que el servicio secreto albanés se ha inflitrado en tu blog.
De filosofos no entiendo, de albaneses tampoco, pero para serpentear por el camino de la alcubilla y llevar agua en un cantaro hay que tener espaldas de Platón y una minima inteligencia, asi que dudo yo tu serpentear por el camino antiguo de la alcubilla con un cantaro o un saco de almendras a la espalda,en ese tiempo tu tenias un andador al que yo le até una cuerda para que no llorases porque no llegabas al suelo y un dia saliste disparado como de un tirachino, además parecias un mosquito encerrado en una botella, nervioso, rabioso, imprudente, locuelo, jajaja, pero eso si, tu estrenaste el andador, los demás aprendimos a andar a cabezazos, por eso tu fuiste el primer filólogo y el mejor filosofo.
Matranto es una planta que se cria donde hay agua, pero no viene en el diccionario y para saber cual es, hay que ir mas al campo o ser amigo de cabreros y labriegos. Cuando hables de campo cuenta con el bruto de tu hermano, de siete hermanos todos no iban a ser filologos, alguno tendria que ser ......como diria pon tu el adjetivo. El domingo nos veremos las caras.
Piyayo, eres como una metralleta. Disparas flores y balas.
Quien son los albaneses?
Nosotros somos gente que amamos la paz.
Aristoteles no es albanes, es griego y siempre los griegos dicen que son albaneses para decir cosas malas para nosotros.
La nuestra dictadura estaba mas cruel del mundo y vos, en Espana sabéis que es una dictadura.
De Albania es Madre Teresa (Premio Nobel), es prof. dr. Ferid Murati (Premio Nobel ), Ismail Kadare (candidato de Premio Nobel y ganador de muchos premios literarios, es traducido también en español), John y James Belushi (actor), Eliza Dushku (actriz) y muchos mas.
Pero mas conocido es Skanderbeg (Gjergj Kastrioti - el héroe nacional de Albania) podéis leer mas aquí:
http://es.wikipedia.org/wiki/Skanderbeg
Albania (en albanés Shqipëria) es una república del sudeste de Europa. Limita con Montenegro al norte, Serbia (incluyendo Kosovo) al noreste, la República de Macedonia al este, y Grecia al sur. Está bañada por el mar Adriático al oeste, y el mar Jónico al suroeste. Su capital y mayor ciudad es Tirana.
El nombre autóctono del país, Shqipëria, significa "Tierra de las águilas". Fue adoptado a partir de la rebelión contra los turcos dirigida por Gjergj Kastriot ("Skanderbeg") en 1433. En esa época, la población libre del territorio adoptó el gentilicio de shqipëtar, ya que la bandera usada por Skanderbeg poseía como emblema principal el águila imperial bicéfala heredada de los bizantinos. El nombre Albania, en cambio, es ajeno a los nativos y deriva del latín albus, blanco, en referencia a la nieve de las montañas.
El pueblo más antiguo conocido que habitó el actual territorio de Albania fue el de los ilirios, de los cuales los shqipëtars o albaneses son descendientes. Los griegos colonizaron las costas y el sur del territorio, que quedó en gran parte incluido dentro del Epiro. Los ilirios efectuaban frecuentes incursiones en los estados helenísticos de la Molosia, Peonia e incluso la Macedonia. En el 35 a. C., los romanos conquistaron los sitios más accesibles y civilizados, denominándoles provincias de Illyricum y Epiro, aunque los territorios más montañosos y remotos nunca llegaron a estar bajo control del Imperio Romano.
Bajo los romanos, Iliria conoció una época de paz y prosperidad. La principal ruta comercial entre Roma y Constantinopla, la Vía Egnatia, discurría entre Epidamnos /Durrës y Tesalónica. Los ilirios, al igual que los griegos, conservaron su lengua y sus tradiciones durante el dominio romano. Cuando el Imperio Romano quedó dividido en el año 395 dC, los ilirios fueron asimilados por el Imperio Bizantino. Durante los siglos V y VI confluyeron con pueblos itinerantes como los visigodos, hunos, ostrogodos y eslavos.
Entre 1443 y 1468, Gjergj Kastriot llamado Skanderbeg, dirigió en nombre de los albaneses las luchas conjuntas de serbios, búlgaros, rumanos y otros pueblos de la zona contra los turcos otomanos, convirtiéndose en el héroe nacional y un icono de la lucha contra el invasor islámico. Antonio Vivaldi le dedicó una ópera a Skanderbeg con el mismo nombre. De esta época datan los primeros documentos escritos en lengua albanesa, en alfabeto cirílico.
En ese largo período de ocupación sucedieron varios hechos determinantes para la actual cultura albanesa: gran parte de la población urbana ortodoxa se exiló, principalmente en el sur de Italia y Grecia, mientras que la mayoría de la población que se mantuvo en el país fue convertida al islam, a lo largo de los siete siglos de ocupación. Tras la progresiva conversión al islam (por interés y supervivencia) y la asimilación turca de gran parte de los albaneses, Albania se convirtió en un Estado privilegiado y leal al Imperio, alcanzando altos cargos en la administración del Imperio y también como fuerzas de choque para mantener el control sobre Grecia, Serbia, el territorio de la actual República de Macedonia y Bulgaria.
En 1912, ante las sucesivas derrotas que sufrieron los turcos en los Balcanes, Albania obtuvo de hecho la independencia, aunque se cernía la amenaza del expansionismo austríaco e italiano. Durante la Primera Guerra Mundial el empobrecido territorio fue campo de batalla entre las fuerzas de la Entente Cordiale y las de los autodenominados Imperios Centrales, y al concluir la guerra se ratificó el control serbio-montenegrino sobre Kosovo y las zonas de mayoría albanesa en la Macedonia septentrional; Grecia obtuvo hasta la Segunda Guerra Mundial el control del Epiro Septentrional (Épiro del Norte), donde la población de origen heleno (griego) constituía desde milenios la mayoría. En 1918 en Argirópolis ( pese a que esta ciudad estaba en la zona de mayoría griega ) se proclamó la independencia formal de Albania, aunque la "Albania independiente" pronto pasó a ser en la práctica un protectorado italiano al mando inicialmente de Ahmet Zogu.
Albania fue una monarquía entre 1928 y 1943. Contó con sólo dos reyes:
• Ahmet Zogu, Zog I de Albania (1928-1939)
• Víctor Manuel III de Saboya (1939-1943) Rey de Italia, Rey de Albania y Emperador de Etiopía.
Tras el final de Segunda Guerra Mundial, el partido comunista, creado en 1941 bajo la influencia de los bolcheviques, tomó el control del estado albanés, bajo el liderazgo de Enver Hoxha, quien había combatido en la resistencia. En 1955, Albania pasó a ser miembro del Pacto de Varsovia.1
Durante algunas décadas bajo su domino, Hoxha estableció y rompió las relaciones con diversos países socialistas. El país fue aislado, primero por Occidente, luego Hoxha hizo una dura crítica a Nikita Jrushchov, rompiendo relaciones con la Unión Soviética y acercándose a China.
En 1985, Enver Hoxha murió y Ramiz Alia tomó su lugar. Inicialmente, Alia intentó seguir los pasos de Hoxha, pero los cambios en Europa del Este ya habían comenzado: Mijaíl Gorbachov había aparecido en la URSS con nuevas políticas (Glásnost y Perestroika). Después de que Nicolae Ceauşescu (líder comunista de Rumanía) fuera ejecutado en una revolución, Alia firmó el Acuerdo de Helsinki (el cual fue firmado por otros países en 1975), por el que se comprometía a modificar la legislación en materia civil. Fueron convocadas elecciones pluripartidistas, que ganó el Partido Demócrata en 1992 con el 62% de los votos.
Desde 1990 Albania ha estado orientada hacia el "Occidente", fue aceptada en el Consejo de Europa y ahora forma parte de la OTAN.
En 2007 Albania se convirtió en el primer país del mundo en eliminar todo su armamento químico.2
En materia de derechos humanos, respecto a la pertenencia en los siete organismos de la Carta Internacional de Derechos Humanos, que incluyen al Comité de Derechos Humanos (HRC), Albania ha firmado y ratificado
Gracias, Albania, por esta información. He leído toda la historia y me he quedado muy interesado por este país tan luchador que ha dado a la historia figuras como la madre Teresa. Atentamente, Jesús Cotta
Gracias Jesus.
Tambien Ernesto Sabato es albanes (la madre es albanesa) :)
Aqui dejo un otra cosa para Albania
http://www.elpais.com/articulo/cataluna/Skanderbeg/Barcelona/reencuentro/elpepiespcat/20090207elpcat_27/Tes/
No sabía yo lo de Sábato.
En mi entrada no he contado que este albanés de origen griego me dijo que en Albania el Catalano era una especie de monstruo con que se asustaba a los niños. ¿Es eso cierto? No lo conté en mi entrada para que no se ofendieran los catalanes. Un abrazo
Eso de Catalán no es verdad. En Albania siempre se habla bien por los españoles porqué sabemos que habréis sufridos muchos como nosotros. En vuestra guerra civil muchos albaneses han luchado con vosotros.
En Candás traducen el albanés
La profesora Marta María García Suárez investiga en su tesis sobre la obra de Petro Marko, escritor de Albania y brigadista en la guerra civil española
Candás,
Braulio FERNÁNDEZ
En Albania, un país poco conocido para los españoles, nació y murió en el siglo XX un poeta revolucionario que usó la pluma con tanto arrojo como empuñó el arma. Petro Marko es considerado hoy en día en Albania como el segundo literato más importante de su historia.
Buena parte de esa consideración se debe a la labor de investigación llevada a cabo desde 2001 por una asturiana residente en Candás, Marta María García Suárez, que en la actualidad compagina su labor docente en el Colegio San Félix de la villa con la metódica labor de la investigación histórica. Gran conocedora del país balcánico, García Suárez emprendió una cruzada por recuperar del olvido el nombre de un revolucionario que allá por los años treinta concibió una idea de la libertad que le llevó a derramar su propia sangre junto a los españoles en la guerra civil con las Brigadas Internacionales.
Es, posiblemente, Petro Marko uno de los escasos nexos de unión entre dos países que comparten poco más que el mar Mediterráneo. Y también un saludo: ¡hasta la vista! La expresión es muy usada por aquellos lares, por extraño que parezca. La misma García Suárez reconoce la sorpresa que le causó su uso en boca de tantos albaneses. «Le consulté a mi marido, que me había precedido en la visita al país, y aquél fue el comienzo de todo», dice la profesora a la hora de explicar su relación con Petro Marko.
«La respuesta estaba en el título de una novela muy conocida». Y la novela no era otra que una de Marko, a cuya obra y vida esta vecina de Candás ha dedicado los últimos años de su vida. García Suárez nació en Trubia y la pequeña localidad asturiana se convirtió tan sólo en un punto de partida para viajar por Suiza, Italia y la misma Albania, en la que vivió durante cuatro años.
Para contar la historia de Petro Marko no sólo ha tenido que leer la obra completa del autor, de la cual no existe ningún título traducido al castellano, sino entrevistarse con familiares, conocidos y pisar los mismos lugares por los que pasó Marko. «Fueron horas y horas de entrevistas tremendamente enriquecedoras, que conjuntamente con la obra principal de Marko sustentan mi estudio», continúa García Suárez.
La profesora elabora una tesis doctoral bajo la tutela del profesor de Literatura Española de la Universidad de Oviedo Antonio Fernández Insuela, lo que la lleva a cumplimentar la primera traducción de «Hasta la vista» al castellano, permitiendo así que en un país como España, por el que Marko sintió tanta admiración, sea conocido su nombre.
La figura de Marko está muy unida a la de García Suárez en la capital de Albania. El pasado mes de noviembre la asturiana acudió al país balcánico a dar una conferencia sobre el autor, encuadrada dentro de unas jornadas culturales españolas. Un país, España, que gracias a Marko es hoy en día admirado por los albaneses. Como García Suárez reconoce no sin algo de rubor, su propio rostro ya es habitual en las páginas de los diarios albaneses. Su nombre se une al de Ramón Lizarralde, traductor «oficial» de Ismael Kadaré, el más universal de los escritores albaneses. Su compromiso con la figura del revolucionario va más allá de lo científico: «Llegas a llorar y a reír al paso que vas desentrañando su vida». Espera que en España se conozca a Marko con «Hasta la vista».
Querida Albania, estoy impresionado con todo lo que me cuentas. Seguiré el rastro de Hasta la vista y leeré la historia de Marko.
Me alegro de no haber dicho nada del Catalán. Así no meto la pata.
Leeré también a Kadaré. Ex corde, Cotta
http://www.tdr.cesca.es/TESIS_UAB/AVAILABLE/TDX-1010105-174756//em1de1.pdf
(Enkeleda es albanesa)
Saludos Albania
Gracias, siempre me intrigó el albanés como lengua indoeuropea, tan cercana y a la vez tan desconocida, rodeada de lenguas eslavas, latinas y griegas sin ser eslava, latina ni griega. Saludos
http://fundacionprincipedeasturias.org/
ISMAÍL KADARÉPREMIO PRÍNCIPE DE ASTURIAS DE LAS LETRAS 2009Narrador, ensayista y poeta, Ismail Kadaré, representa la cima de la literatura albanesa que, sin olvidar sus raíces, ha traspasado fronteras para alzarse como una voz universal contra el totalitarismo. Considerado uno de los grandes escritores e intelectuales europeos del siglo XX, sus obras han sido traducidas a más de cuarenta idiomas.
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