Cuando descubrí que mis padres eran Reyes Magos, cigüeñas y mortales, mi niñez dejó de ser felizmente azul e ingenua y comencé a parecerme un poco al que soy ahora.
No recuerdo cuándo me enteré de que los padres asumían durante una noche el papel de Reyes Magos. Lo que sí recuerdo es que, tras el chasco, vino el agradecimiento y ahora les devuelvo todos esos regalos haciendo de Reyes Magos para mis hijas. Cuando ellas me ponen junto al belén tres copitas de anís con tres bombones, me siento como a bordo de un cometa, repartiendo estrellas fugaces por la Tierra.
Los otros dos descubrimientos los recuerdo con nitidez.
Una tarde le pregunté a mi padre ciertas preguntas acerca del nacimiento de los niños y mi padre, mirándome con una sonrisa y acariciándome la barbilla, me explicó en un lenguaje sencillo y cariñoso cómo se hacían los niños. Si me lo hubiera explicado un amigo, no me lo habría creído, por inverosímil, porque me parecía algo muy marciano y aún hoy sigo asombrado de que los niños se hagan así.
Una noche caí en la cuenta de que mis padres se tendrían que morir y todavía se me encoge el corazón. Mi padre ya ha muerto, como él quiso, en su casa y rodeado de sus siete hijos. Una semana antes nos impartió su bendición como un patriarca de la Biblia y nos dio unos consejos que aún nos esforzamos por llevar a la práctica. Menos mal que todavía tengo a mi madre, que no le tiene miedo a la muerte, sino a dejar de vernos. Si no fuera porque tengo hijas con las que me gusta jugar, el niño que aún soy por dentro moriría cuando me quede huérfano del todo.
Ahora soy yo el Rey Mago y la cigüeña y el mortal, cada día más. Si yo no tuviera hijas, sería sólo el mortal.
5 comentarios:
Աստված Jesús Cotta: ինքն է քանզի ստվածաշունչն ասում է Նորա խոստմունքի պէս՝ նոր երկնքի եւ նոր երկրի ենք սպասում, որոնցում արդարութիւն է բնակվում. Այս խոսքերը գրի առնվելուց հետո դարեր են անցել Կատարվելու ժամանակն արդեն մոտ է, ինչի մասին և վկայում է աշխարհի ներկայիս իրավիճակը.
La felicidad que se va cuando uno se da cuenta de todo eso, creo que se suple al instante al ver la felicidad reflejada en la cara de tus hijos.
Muy nostálgico, pero muy esperanzador. Eso de perpetuar la infancia en los hijos suena a cuento de hadas, pero gracias a Dios no puede ser más cierto.
Ex corde, qui frater vocatur tuus.
"Si yo no tuviera hijas, sería sólo el mortal"
-emocionante revisión de la paternidad.
Fdo: Otra Cigüeña Maga.
A Aibazian no sé qué decirle, porque aún no domino el armenio, y no por falta de interés, sino de tiempo.
No sé si el doctor Bito tiene hijos, pero ha dado en la tecla: en la infancia recibíamos el amor y ahora nos toca darlo.
Sansón Carrasco me suena a alias querido y cercano. Bienvenido, frater.
Me gusta cómo firma José María: otra Cigüeña Maga. Y además me ha hecho caer en la cuenta de que la última frase de mi entrada es más hermosa de lo que creía. Gracias.
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